DERROCHA ELEGANCIA
EL SEDÁN MEDIANO DE LA FIRMA ESCANDINAVA PRESUME DE SEGURIDAD TOTAL, UN DISEÑO AGRESIVO Y UN POTENTE MOTOR QUE LE OTORGA UN MANEJO DINÁMICO
La primera generación del S60 debutó en el 2000 y 21 años después, estamos frente a la tercera generación del sedán de la firma sueca que ostenta una maduración perfecta que se puede ver en el diseño.
En la parte frontal, llaman la atención los faros principales "martillo de Thor", que se complementan con la parrilla, cuya geometría destaca con el logo de la firma, cruzado en diagonal por dos líneas cromadas.
Las vistas laterales presumen de unas buenas proporciones, gracias a las dimensiones de las puertas más altas que las ventanas; en el largo cofre encontramos su aspecto robusto, pero sobre todo elegante. En la parte trasera, se aprecian los hombros laterales que le dieron identidad al vehículo cuando nació, aunque suavizados y bien integrados.
El tablero se luce con la instalación de un sistema de infoentretenimiento dotado con una pantalla táctil a color de nueve pulgadas, que ofrece conectividad Apple CarPlay y Android Auto.
Bajo el cofre se encuentra un enérgico motor de cuatro cilindros de 2.0 litros turbo y supercargado, capaz de generar 254 caballos de fuerza y 258 libras pie de torque; acoplado a una transmisión automática de ocho velocidades con modo manual, cuyos cambios se pueden manipular a través de las palancas ubicadas detrás del volante.
En seguridad equipa: control de tracción y estabilidad, alerta de tráfico cruzado con asistencia, bolsas de aire, frenos con sistema ABS, alerta de tráfico cruzado, advertencia de abandono de carril, monitoreo de presión de llantas y cámara de reversa.