Estricto control sanitario encontraron los atletas
El control y las medidas para prevenir contagios de Covid-19 son de otro nivel, completamente
A tan solo 24 horas de haber llegado a la sede de los Juegos Olímpicos, el tulancinguense Eligio Cervantes y la delegación de triatlón han sido sometidos a tres pruebas PCR. La ciudad está lista para la justa internacional.
Los Juegos Olímpicos marcarán un antes y un después en el mundo sobre el manejo del tema de la pandemia por covid-19; así lo manifestó el delegado de la disciplina de triatlón, el tulancinguense Eligio Cervantes, quien se encuentra en el país nipón desde hace un par de días.
El ex olímpico mexicano manifestó que Tokio se encuentra preparado para llevar a cabo esta justa deportiva internacional, con un destacado control de protocolos para poder ingresar a la ciudad.
“Hay que hacer un protocolo de seguimiento por una aplicación 14 días antes,durante toda la estancia y tres días después”, señaló.
Explicó también que durante su estancia, los atletas serán sujetos a pruebas PCR de saliva a diario, así como el monitoreo de temperatura en todos lados, además de todas las medidas de bioseguridad universales.
Además, para poder ingresar a la Villa Olímpica, hay un control muy alto y en estos momentos están listos todos los preparativos
La delegación mexicana de triatlón entrará en acción los días 26, 27 y 31 de agosto
para la inauguración.
Como se había informado previamente, los atletas de todos los países no pueden salir de la villa olímpica, y tampoco hay contacto con la población; por ello, todas las competencias serán sin público.
En cuanto a la noticia que ha circulado en las últimas horas, respecto a una posible suspensión de última hora de los Juegos Olímpicos ante el repunte de casos coronavirus a nivel mundial, Cervantes señaló que en Tokio no hay una sola mención al respecto, ni por el Comité Olímpico Internacional, ni por el Comité Olímpico Mexicano, mucho menos por la federación internacional de triatlón.
Finalmente, Eligio Cervantes destacó que, pese a los tiempos que se viven, este será un evento de una gran magnitud; sobre todo porque la cobertura es la más grande en todo el mundo, más allá del mundial de fútbol, tomando en cuenta la cantidad de espectadores.