Classic nudes: El porno y los museos
El portal Pornhub abrió una sección con los desnudos más célebres de la historia, que se encuentran en algunos de los museos más populares
"La pornografía puede no ser arte, pero algo del arte definitivamente puede considerarse porno”
Pornhub lanzó la campaña "Classic nudes", una guía interactiva sobre cuadros con desnudos custodiados en los museos más importantes del mundo.
“Algunos piensan en los museos como aburridos. Pero, ¿y si te dijéramos que albergan una colección de porno invaluable?” asegura el sitio en la introducción a dicha guía, en la que dicen incluir algunas de las escenas más sexys de la historia que se encuentran en los museos más famosos del mundo.
“Únase a nosotros mientras recorremos las instituciones más respetadas del arte occidental, guiándolo más allá de todas las pinturas mojigatas y yendo directamente a lo bueno: Representaciones del cuerpo desnudo en todo su esplendor artístico... Porque la pornografía puede no considerarse arte, pero algo del arte definitivamente puede considerarse pornografía”, agrega el texto.
El sitio hace un recorrido por instituciones del arte como la National Gallery (Londres), el Louvre (París), el Met (Nueva York) y el Museo del Prado (Madrid).
De este último, por ejemplo, nos llevan a apreciar “La maja desnuda”, de Goya; “Adán y Eva” de Durero y “Ninfas y Satiros”, de Rubens.
Además de llevarnos a admirar de cerca estas pinturas, en otra de sus secciones el portal ofrece contenido interactivo, en el que algunos actores porno explican las obras o incluso hacen alguna representación de ellas.
HASTA QUE LOS DEMANDARON
Uno de los lienzos que repasa de esta manera es "El nacimiento de Venus" (1485) de Botticelli, obra cumbre del Renacimiento florentino y uno de los mayores tesoros de los Uffizi, que en este caso es explicada por la ex actriz porno y expolítica italiana Ilona Staller "Cicciolina".
Al respecto, los Uffizi ha decidido enviar un requerimiento a Pornhub, propiedad de la compañía luxemburguesa MindGeek Holding, para que retire dicha campaña porque no pidió permiso para utilizar sus obras con fines comerciales.
“El procedimiento correcto habría sido pedir la autorización a Los Uffizi o al Museo
de Cultura italiano, presentar el proyecto a la dirección de la pinacoteca y, en caso de que fuera aceptado, pagar un impuesto por el uso de la imagen del cuadro”, argumentaron.
Los Uffizi recordó entonces que Italia cuenta con una ley de 1993, actualizada en 2004 y 2014 en el Código de los Bienes
Culturales, que permite el uso libre de la imagen de los cuadros si se hace a título privado o con fines científicos, educativos o informativos.
Sin embargo su uso con finalidades comerciales debe ser aceptado y pagado, según argumentan los representantes legales de dicha galería.