Por fin concretan mesa de seguridad
Luego de varios intentos fallidos, pobladores y gobierno se sientan a negociar la pacificación del municipio
MORELIA. Autoridades federales se reunieron con pobladores de Aguililla, Michoacán, con el objetivo de entablar las mesas de diálogo que se habían interrumpido en días pasados para atender demandas de los habitantes de la comunidad que ha sido escenario de enfrentamientos entre el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el grupo Cárteles Unidos de Michoacán.
La semana pasada se intentó establecer un diálogo entre pobladores de Aguililla y los gobiernos estatal y federal, encuentro que terminó en gritos y reclamos hacia las autoridades y miembros del Ejército Mexicano por parte de los habitantes de ese municipio del noroeste del estado golpeado desde hace nueve semanas por la violencia generada por los cárteles de la droga.
Luego de al menos cinco horas de conversaciones, se solicitó que en primer término se investigue a fondo los hechos acontecidos a inicios de junio, cuando se registraron enfrentamientos entre pobladores y miembros del Ejército Mexicano, informó el párroco de la comunidad, Gilberto Vergara.
A nombre del Gobierno federal, la voz cantante la tuvo Félix Arturo Medina Padilla, titular de la Unidad de Políticas y Estrategias para la Construcción de Paz con Entidades Federativas y Regiones, dependiente de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, quien informó que son más de 15 dependencias las que van a trabajar en conjunto para devolver la paz a Aguililla, lo que incluye programas sociales y obras públicas, todo empaquetado en 28 proyectos de un “Plan de Bienestar Integral”. Entre los ofrecimientos está la construcción de casas, el programa Jóvenes Construyendo el Futuro y obras de agua potable.
Durante la mesa de diálogo, pobladores de Aguililla cuestionaron cómo el Gobierno federal contendrá la inseguridad, a lo que Félix Arturo Medina planteó que una petición era la colocación de un puesto de vigilancia, pero enseguida surgió el rechazo, aduciendo que esos patrullajes no han funcionado.
Los pobladores hicieron hincapié en que no se les marque ni estigmatice como parte de la rivalidad entre los grupos del
CJNG o Cárteles Unidos, toda vez que no pertenecen a ninguno, que, por el contrario, están en medio de una confrontación que les es ajena.
El padre Gilberto Vergara reprobó que en redes sociales ya comienzan a correr las versiones en el sentido de identificar a los vecinos con uno u otro bando. “Señalan a personas y eso es hostigamiento”.
Otra de las solicitudes de la población es que personal de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) forme parte de los retenes que se implementen en la zona de Aguililla, con el propósito de que se eviten abusos, pues no se tiene confianza plena en la Guardia Nacional, a cuyos elementos acusan de permitir la incursión de grupos delictivos. “Pareciera que los utilizan como escudos”, refirieron los habitantes.
Al final de la reunión se firmó una minuta de acuerdos, misma que posteriormente darán a conocer a los medios de comunicación.
El padre Gilberto Vergara recordó que en la zona de Tierra Caliente se desató la violencia entre Cárteles Unidos y el CJNG luego del rapto del exlíder de autodefensas en Tepalcatepec, Ángel Gutiérrez Aguilar, quien el pasado martes fue rescatado.
El 7 de julio hubo confrontaciones entre pobladores y elementos castrenses, presuntamente por el incumplimiento del pliego petitorio que los habitantes realizaron, y un día después los habitantes de Aguililla destruyeron el helipuerto que el Ejército mantenía a un costado de su base militar como parte de sus medidas de presión para que les den seguridad.
GILBERTO VERGARA PÁRROCO “Se desató la violencia luego del rapto de Ángel Gutiérrez exlíder de autodefensas en Tepalcatepec”