Grupo Posadas busca Ley de Quiebra en EU
La empresa informó que espera que el procedimiento legal concluya en un aproximado de 60 días
La empresa hotelera Grupo Posadas inició un proceso voluntario de reestructuración financiera bajo el Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos, el objetivo es reducir su deuda y extender los plazos de sus pagos.
En su reporte financiero, correspondiente al tercer trimestre, el grupo informó que espera que el procedimiento legal concluya en un aproximado de 60 días, tiempo durante el cual continuará operando con el flujo de efectivo de su negocio en marcha.
“Después de la presentación de la solicitud, las operaciones cotidianas continuarán normalmente y sin interrupción, utilizando los recursos de las operaciones en marcha. La compañía seguirá honrando sus compromisos", publicó.
El proceso de reestructura fue aprobado por la totalidad de los tenedores de notas senior con vencimiento 2022, lo que permitirá reducir el pago del servicio de la deuda y extender el plazo de vencimiento de los papeles en 5.5 años, hasta el 30 de diciembre de 2027.
José Carlos Azcárraga, director general de Grupo Posadas, comentó en un comunicado que la reestructuración integral de la deuda fue anunciada hace dos meses como parte de los esfuerzos de la compañía por maximizar su flexibilidad financiera y administrar de mejor manera los desafíos relacionados con el Covid-19.
En su informe de resultados del tercer trimestre, la empresa, cuyas acciones no registran movimientos en la bolsa mexicana desde el 6 de octubre, cita que el saldo pendiente por pagar de sus títulos con vencimiento 2022 era 393 millones de dólares, esto al cierre de septiembre.
La estrategia implementada por Posadas, se enfocó en consolidar su portafolio de hoteles y resorts para enfocarse en los destinos que le den mayor valor en el corto plazo. En ese sentido, la empresa vendió el proyecto en desarrollo de la Riviera Maya, obtuvo recursos del orden de 57 millones de dólares que contribuyeron a mejorar su posición financiera.
El grupo hotelero, considerado el mayor del país con 181 propiedades y 28 mil 633 habitaciones en diversos destinos de playa y ciudad, fue afectada como toda la industria turística por la pandemia y las restricciones de viajes.
Solo en los primeros nueve meses de 2021 la pérdida neta de la compañía ascendió a 398 millones de pesos, de acuerdo con su reporte. No obstante, la empresa mexicana reportó ingresos por cinco mil 242.5 millones de pesos en lo que va del año, esto equivale a mil 552 millones de pesos más que lo reportado entre enero y septiembre del año pasado.