Asesinan a líder de policía comunitaria
Mario Zamora Maldonado, el comandante Gerónimo, mantuvo una lucha de años contra Los Ardillos
La gobernadora Evelyn Salgado reconoció que no ha sido fácil gobernar el estado ante los hechos violentos
6 murieron en los enfrentamientos registrados ayer en esta región de Guerrero
“Los Ardillos nos infiltraron y tuvimos que romper relaciones con algunos pueblos”
COMANDANTE GERÓNIMO ENTREVISTA CON EL SOL DE ACAPULCO
CHILPANCINGO. Mario Zamora Maldonado, el comandante Gerónimo, fue uno de los seis muertos en los enfrentamientos que se registraron la noche del miércoles en Chilpancingo. Fue uno de los líderes de las policías comunitarias que defendían la comunidad de Buena Vista de la Salud y al Valle del Ocotito de las incursiones del grupo criminal conocido Los Ardillos.
Zamora Maldonado fue profesor de primaria egresado de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa. En 2013, cuando era secretario de organización de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG), coordinó las movilizaciones en contra de la reforma educativa impulsada por el expresidente Enrique Peña Nieto.
Con el apoyo de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), un grupo de policía comunitaria, formó las autodefensas de Buena Vista de la Salud para combatir los secuestros, extorsiones, venta de drogas y asesinatos perpetrados por Los Ardillos.
El comandante Gerónimo implementó en su comunidad un sistema de justicia alternativa para brindar paz a la zona, que explicó en una entrevista a
en junio de 2021.
El sistema de justicia ciudadano incluye
PERSONAS
la rehabilitación de personas que cometen un delito, sin necesidad de encarcelados. En su lugar, son sometidos a trabajos comunitarios y pláticas para fomentarles un cambio en su formación personal.
El sistema atiende también a personas que sufren de problemas como alcoholismo y drogadicción y que a petición familiar son sometidos a este proceso de reeducación. “Hemos tenido buenos resultados con personas que ya han estado muchas veces en anexos y no veían mejoras”, dijo Maldonado en aquella ocasión.
“Aquí ya no tenemos robos, secuestros u otro tipo de delincuencia asociada a grupos criminales, pero hemos tenido al menos cuatro ataques a la comisaría y otras tantas emboscadas en las que nos asesinaron a un compañero y nos han herido a varios más”, explicó el maestro.
Sin embargo, los constantes ataques de Los Ardillos y su posterior infiltración en las policías comunitarias provocó el rompimiento de Mario Zamora con varios de sus colegas.
“Teníamos grupos desde Palo Blanco y cubríamos todo el valle. Sin embargo, Los Ardillos nos infiltraron y tuvimos que romper relaciones con algunos pueblos; en otros la policía desapareció y algunos están controlados por ellos”.
El dirigente de la UPOEG, Bruno Plácido Valerio, condenó el ataque armado que sufrió la base comunitaria de Buena Vista de la Salud donde murió Maldonado Zamora.
“Hoy ha partido un gran compañero, un gran camarada, un gran maestro, un gran normalista, un gran amigo, congruente y consecuente con sus principios y valores. Exigimos y demandamos a las autoridades estatales y federales el castigo a los culpables de este cobarde asesinato”, comunicó.
Por su parte, la gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado Pineda, aseguró que no quedarán impunes los hechos registrados en comunidades de Chilpancingo y reconoció que no ha sido fácil gobernar el estado ante los hechos de violencia.
“Hechos como el de ayer, que condeno, lamento y repruebo, no quedarán impunes. Nadie dijo que sería fácil, sin embargo, trabajamos todos los días por no desatender ningún tema, por más complejo que sea”, afirmó la mandataria.