El Sol de Tulancingo

Piden no más inundacion­es

Y que se acabe la pandemia, las peticiones al momento de llevar a bendecir a su Niño Dios

- CESAR MARTÍNEZ

TULA DE ALLENDE, Hgo.- Que no ocurran más inundacion­es en esta ciudad y que se acabe la pandemia causada por el Covid-19, fueron algunas de las peticiones que hicieron la mayoría de creyentes católicos que acudieron, ayer, a la Catedral de Tula para bendecir a su Niño Dios, en el marco de la tradiciona­l celebració­n eclesiásti­ca del Día de la Candelaria.

Desde temprana hora y hasta la tarde, los habitantes que acudieron al recinto religioso y llevaban en su mayoría vestido a su Niño Dios con vestimenta del Niño de la Salud y Niño Doctor, pidieron a Dios y la Virgen de Guadalupe que ya nunca más vuelva a suceder otra contingenc­ia aquí como la ocurrida el pasado seis de septiembre del año anterior y además den mucha salud a la población de esta región, en estos tiempos de pandemia que aún prevalecen en todo el mundo.

Tan solo Marisela Alpízar y su esposo Luis López, quienes son damnificad­os de la inundación, señalaron ayer que acudieron a la Catedral para llevar a presentar a su Niño Dios quien traía vestimenta del Niño del Sagrado Corazón de Jesús y pidieron a Dios que haya salud para la comunidad tulense y que salga adelante tras la pasada contingenc­ia.

“Ojalá que ya no ocurra otro desastre en esta ciudad y venimos a dar gracias a Dios que tenemos salud para salir adelante y seguimos trabajando en el tianguis municipal donde tenemos nuestro puesto donde reparamos y vestimos Niños Dios y un salón de belleza los cuales resultaron dañados al desbordars­e las aguas negras del Río Tula el año pasado” dijeron los damnificad­os.

Mientras que María Domingo precisó ayer que llevo a sus dos Niños Dios vestidos de color blanco a bendecir y aunque no resultó damnificad­a en la inundación, le pidió a Dios que siga ayudando a los damnificad­os y los bendiga siempre para que Tula se levante.

“La tradición de traer a presentar a mis Niños Dios la tengo desde hace veintidós años, pues año tras año, los traigo a la Catedral a bendecir y esto me lo inculco mi madre. Siento mucha alegría de traer a mis Niños Dios aquí porque esto es más que si me hubieran dejado una herencia” indicó la mujer.

Finalmente, Eduardo Martínez dijo que acudió junto con sus familiares a presentar al Niño Dios a la iglesia y lo llevo con vestido del Niño de la Salud y pidió a Dios y la Virgen de Guadalupe que llegue una recuperaci­ón pronta para los damnificad­os de la inundación y salgan adelante en la vida, además que haya mucha salud para todos por cuestión de la pandemia actual.

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Eduardo Martínez, en la entrevista

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