ASALTO RUSO DEVASTA ZONAS CIVILES EN KIEV
MOSCÚ PIDE A CIVILES UCRANIANOS HUIR ANTE NUEVA OFENSIVA; ONU BOICOTEA INTERVENCIÓN DEL KREMLIN
352 CIVILES han muerto en Ucrania durante la ofensiva rusa, según las autoridades ucranianas
60 KILÓMETROS mide una fila de vehículos y artillería rusa que se encamina a atacar Kiev
MOSCÚ. Rusia, presionada por las sanciones occidentales, bombardeó en el sexto día de la guerra contra Ucrania varias ciudades y reforzó sus tropas cerca de la capital, donde espera una kilométrica columna de vehículos la orden de ataque y donde efectuó un ataque quirúrgico contra una torre de televisión.
La orden de ampliar la ofensiva dada por el presidente ruso, Vladímir Putin, se hizo notar en todos los frentes: el sur, el norte y el este, con el ministro ruso de Defensa, Serguéi Shoigú, advirtiendo de que Rusia continuará la "operación especial" hasta que "alcance sus objetivos".
Las tropas rusas también bombardearon la ciudad de Járkov, la segunda más importante del país, de 1.4 millones de habitantes, y provocaron la muerte de 18 personas y 26 heridos. Mientras que el ataque en la torre de televisión de la capital dejo un saldo de cinco muertos y cinco heridos. La señal de televisión quedo totalmente interrumpida.
A su vez, en el sur, comenzó el asalto ruso a la ciudad de Jersón, a orillas del mar
Negro y junto al río Dniéper, y en Mariúpol los ciudadanos quedaron prácticamente sin suministro eléctrico por los ataques.
En el noreste, en la región de Sumy, más de 70 militares y civiles murieron en bombardeos rusos con lanzaderas múltiples GRAD, según Ucrania.
En el este, los separatistas prorrusos en el Donbás aseguraron haber tomado el control de 29 localidades dominadas hasta ahora por el Ejército ucraniano, y denunciaron ataques con artillería de las fuerzas de Kiev contra la ciudad de Górlovka, en la región de Donetsk, donde habrían resultado heridos 16 civiles.
Las fuerzas rusas y las milicias de la república popular de Donetsk se hicieron con el control de la costa del mar de Azov, lo que impide el acceso de las tropas ucranianas, dijo el Ministerio de Defensa ruso.
Imágenes satelitales captaron la columna de más de 60 kilómetros de vehículos blindados y artillería rusos que avanzaban desde el norte rumbo a Kiev.
Rusia dijo que atacará las infraestructuras de los servicios de seguridad ucranianos en Kiev por lo que instó a evacuar a los civiles que viven cerca.
Kiev acusó también a Rusia de preparar "una provocación deliberada para justificar la introducción de tropas bielorrusas" en el país vecino, con el que comparte frontera.
El gobierno de la capital advirtió de que la situación actual es "peligrosa" y dijo que el municipio está intensificando la defensa de la ciudad, instalando fortificaciones y puestos de control en las entradas, mientras que el presidente nombró a un responsable militar para la ciudad.
Occidente acusó a Rusia de cometer "terrorismo geopolítico" ante la serie de bombardeos y añadió que con esa ofensiva militar que "la dignidad humana está también bajo ataque".
Occidente aseguró que mantendrá e intensificará sus sanciones "tanto tiempo como sea necesario", además, advirtió que Rusia podría ser expulsada del Consejo de Seguridad de la ONU.
El ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguéi Lavrov, enfrentó dos grandes boicots al intervenir en foros internacionales, en un reflejo del aislamiento diplomático de Moscú
El primero ocurrió cuando varias delegaciones, incluidas las de Ucrania y los países occidentales, abandonaron la sala en momentos que se transmitía por video el discurso de Lavrov en la Conferencia de Desarme, dejando el sitio casi vacío.
Menos de una hora más tarde ocurrió un nuevo abandono de sala cuando el ministro ruso hablaba por video ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
Los ministros de Finanzas de los países del G7 abordaron la discusión de nuevas sanciones contra Rusia, que ya se encuentra bajo una serie de medidas con "impacto masivo" en su economía,