Huachicoleros ahora prefieren robar gas LP
El sector denuncia que tomas clandestinas crecieron más de mil por ciento en 4 años
La estrategia implementada por el gobierno federal desde 2019 para reducir el robo de gasolinas, llevó a los grupos dedicados a este ilícito a “migrar” al mercado del gas LP, denunciaron las principales asociaciones del sector.
En los últimos cuatro años, las tomas clandestinas de gas LP en el país crecieron más de mil por ciento, al pasar de una cada dos días a siete diarias, informó Carlos Serrano, presidente de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Gas LP y Empresas Conexas (Amexgas), quien refirió que estas tomas se localizan en el ducto principal de Pemex de mil 600 kilómetros de longitud que inicia en Chiapas, se interconecta en Pajaritos, Veracruz, y atraviesa todo el centro del país hasta Jalisco.
En ese sentido, dijo, 94 por ciento de las tomas clandestinas que se han detectado se localizan en cuatro estados: Puebla, Estado de México, Tlaxcala y Veracruz. Incluso afirmó que 82 por ciento de estas tomas se ubica en 18 municipios de estas entidades, por lo que se trata de un problema focalizado e hizo un llamado a las autoridades para redolar la vigilancia y acciones contra este ilícito.
De acuerdo con datos recabados por la Amexgas, entre 60 y 65 mil toneladas de gas se distribuyen de forma ilegal en el país cada mes, la mayor parte de éstas, unas 44 mil toneladas, se localizan en la zona metropolitana del Valle de México.
Serrano dijo que esta situación representa un costo para Pemex y el mercado formal de mil 4400 millones de pesos
Por 146 días estuvo suspendido el principal ducto de Pemex durante 2021, dijeron empresarios del gas LP
mensuales, o cerca de 17 mil 300 millones al año, que es lo que se comercializa en promedio en rutas clandestinas, que además dejan de pagar IVA y sin ningún tipo de registro o regulación, lo que pone en riesgo a los hogares.
Luis Landeros, presidente de la Asociación de Distribuidores de Gas LP (ADG), añadió que existen entre cinco mil y ocho mil autotanques no registrados que cargan en plantas clandestinas, lo que además de dañar el negocio legal representa un riesgo para los usuarios.