Artesanos siguen sin recuperarse
Tienen poca mercancía para ofrecer a visitantes y sus ventas se han desplomado
TULA DE ALLENDE, Hgo.-“La situación de los veintiocho artesanos de la Plaza de las Artesanías de esta ciudad es difícil económicamente, pues aún no recuperan su mercancía al cien por ciento luego de ocurrir la pasada inundación que los dejó sin nada y a pesar de que se han endeudado pidiendo dinero prestado con familiares para adquirir material y herramienta para elaborar a mano artesanías, sus ventas se han desplomado hasta un ochenta por ciento”.
Así lo expresó, ayer, la representante de los artesanos María Fernanda Niño Torres, quien agregó que lo anterior se agrava debido a que actualmente está cerrado el puente Zaragoza por los trabajos que se hacen en el Río Tula y que provoca que no pase mucha gente por la céntrica calle Zaragoza donde se ubica el espacio artesanal, durante la mayor parte del día.
MARÍA FERNANDA NIÑO TORRES REPRESENTANTE DE ARTESANOS “Los diez mil pesos que recibieron de parte de autoridades gubernamentales tras suceder la contingencia no les sirvió de mucho y ahora les resulta muy difícil recuperar lo que tenían antes”
La entrevistada señaló que los artesanos no cuentan con suficiente mercancía para ofertar a los visitantes y casi todos los locales son abiertos en diferentes horarios.
“Algunos compañeros tuvieron que pedir dinero prestado a sus familiares para poder reiniciar sus actividades artesanales y los diez mil pesos que recibieron de parte de autoridades gubernamentales tras suceder la contingencia no les sirvió de mucho y ahora les resulta muy difícil recuperar lo que tenían antes” dijo María Fernanda Niño.
La representante de los artesanos precisó que a pesar de que representantes de Hidarte y otras dependencias les dijeron a los locatarios de la Plaza de las Artesanías que los iban apoyar con material y herramienta, hasta ayer no había sido así.
Pidió a autoridades municipales de Tula que les permitan a los artesanos sacar puestos en el teatro al aire libre de esta ciudad, los fines de semana, a fin de que obtengan recursos económicos que les permitan sobrevivir.