El adiós al bueno
PESE A PONERLE FIN A SEQUÍA DE TÍTULOS DE LIGA DE MÁS DE DOS DÉCADAS, EL PERUANO SE VA DE CRUZ AZUL
Juan Reynoso fue el bueno y acrecentó su leyenda en los rumbos de La Noria, pero su estancia en el equipo simplemente no dio para más.
El director técnico peruano fue quien acabó con la sequía de más de 23 años sin título de Liga en Cruz Azul. Él pensaba en su continuidad, imaginó que tenía el crédito suficiente. Apenas un día antes había publicado un video en su nueva red social donde mencionó su deseo de mantenerse en el banquillo por lo que le restaba de contrato, es decir, hasta finales de este año. El timonel inca ha sido indemnizado, junto a todo su cuerpo técnico, al no lograr el anhelo que tenía con el club celeste de la lograr la décima estrella para el equipo lo cual ya no podrá cumplirse.
El último año no fue el mejor en cuanto a resultados para la institución, y la directiva cementera decidió darle las gracias. La ruptura con el director deportivo Jaime Ordiales, incluso con Víctor Velázquez, del Consejo de Administración de la Cooperativa, influyó también para la decisión de su salida, a pesar de que hubo un agradecimiento por la gloria que alcanzaron juntos en mayo del año pasado.
Reynoso dirigió un total de 75 partidos con La Máquina, duró 1 año, 4 meses, con dos trofeos y una efectividad de casi el 60%, gracias a los 36 triunfos, 20 empates y 19 derrotas que acumuló. Sus buenos números, incluso mejores que otras gestiones, no fueron suficientes.
Lo más sano para todos dentro de la institución fue el termino del vínculo que los unía. El nombre de Juan Reynoso ha quedado grabado con letras de oro en Cruz Azul y siempre será recordado con alegría.
Todo comenzó un 7 de enero de 2021. El técnico sudamericano no fue la primera opción para hacerse cargo del equipo. Los principales candidatos fueron Matías Almeyda, Hugo Sánchez y hasta Antonio Mohamed. Reynoso se encargó de cambiarlo todo a su favor en un lapso muy corto de tiempo. Con un sistema poco espectacular, pero sí muy efectivo, en el Guard1anes 2021 logró rachas históricas de triunfos, un sistema defensivo que pocas veces fue vencido y la efectividad de Cabecita Rodríguez en el ataque. Todo terminó con la vuelta olímpica a finales de mayo y el Campeón de Campeones.
Para el segundo semestre de gestión toda la afición soñaba con un equipo de época, pero poco a poco se diluyó esa idea.
El 2022 comenzó con una nueva ilusión de conseguir más laureles, pero no culminó como se esperaba. La salida de jugadores como Cabecita, Luis Romo, Yoshimar Yotún y Orbelín Pineda mermaron el sistema del peruano. Su crédito se agotó mucho antes de lo que tenía planeado y se decretó el fin de su gestión.