Ideólogo de Putin, en la mira tras atentado
Un coche bomba mata a hija de líder ultranacionalista y provoca la ira de la clase política en Moscú; ataque iba dirigido contra Alexander Dugin, afirman medios rusos
MOSCÚ. El atentado con bomba en que murió Daria Dugina, hija del líder del movimiento neoeuroasianista, Alexander Dugin, uno de los estrechos aliados del presidente ruso, Vladímir Putin, ha provocado una ola de indignación en la clase política rusa, que demanda que el crimen no quede impune.
El líder de la autoproclamada república popular de Donetsk, en el este de Ucrania, el prorruso Denis Pushilin, acusó directamente al gobierno de Kiev de estar detrás del atentado.
“En un intento de eliminar a Alexander Dugin los terroristas del régimen ucraniano han matado a su hija”, escribió en Telegram.
En esa misma red social la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, advirtió de que si se confirma la “huella ucraniana” en el atentado habrá que “hablar de la política de terrorismo de Estado del régimen de Kiev.
“Esperamos los resultados de la investigación”, concluyó la diplomática.
A su vez, el senador ruso Andréi Klishas, calificó el atentado como un “ataque enemigo” y demandó llevar a la justicia a sus autores materiales e intelectuales.
“Este crimen no puede quedar impune (...) Hay que responder con dureza y decisión”, afirmó Piotr Tolstoi, vicepresidente de la Duma del Estado, la Cámara de Diputado de Rusia.
Las autoridades ucranianas toda implicación en el atentado.
“Subrayo que Ucrania no tiene nada que ver con esto, porque no somos un Estado criminal como la Federación Rusa ni somos un Estado terrorista,” dijo Mijailo Podolyak, uno de los asesores del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski.
negaron
Más tarde, Zelenski advirtió que Moscú podría hacer algo particularmente “cruel” esta semana.
“Rusia podría esforzarse en hacer algo particularmente repugnante y cruel”, declaró durante su alocución diaria.
Un consejero de la presidencia, Mijaílo Podoliak, advirtió por su lado que Rusia podría intensificar sus bombardeos los días 23 y 24 de agosto, en coincidencia con el aniversario de independencia de Ucrania de la Unión Soviética en 1991.
Ante estos temores, las autoridades de Kiev anunciaron la prohibición de cualquier manifestación pública del 22 al 25 de agosto en la capital.
Dugina, de 29 años murió al estallar un bomba en los bajos de su vehículo cuando circulaba por una carretera en las afueras de Moscú procedente de un festival donde había estado con su padre.
Según el digital Gazeta.ru, que cita un canal de Telegran, Dugin tenía previsto regresar a Moscú en coche de su hija, pero cambió de opinión en el último momento.
Dugin, de 60 años, escritor y filósofo, es considerado por medios occidentales uno de los ideólogos que más ha influido en la política rusa de los últimos años y el particular en el rumbo adoptado por el presidente Putin.
Sin embargo, otros observadores han calificado su influencia en el Kremlin de mínima.
Llamado a veces “el cerebro de Putin” o el “Rasputin de Putin”, Dugin es teórico del neoeurasianismo, una alianza entre Europa y Asia liderada por Rusia, lleva años abogando por la unificación de los territorios de habla rusa y otros -incluyendo a Ucrania- en un vasto imperio ruso, y apoyó totalmente la operación militar lanzada por Moscú en febrero.
En su juventud profesó un anticomunismo y antisovietismo radical que abandonó tras la caída de la Unión Soviética al punto que en 1993 defendió con los comunistas la sede del Parlamento de Rusia cañoneado por orden del entonces presidente ruso, Borís Yeltsin.
Más tarde participó en la fundación del Partido Nacional Bolchevique, una formación opositora radical ya desaparecida.
A partir del año 2000 Dugin defiende las ideas de euroasianismo y el conservadurismo, que propone como plataforma ideológica a las autoridades del país, a la que acusa de carecer de toda ideología.
Desde 2015 se encuentra bajo sanciones de Estados Unidos por “acciones o políticas que amenazan la paz, la seguridad, la estabilidad o la soberanía o la integridad territorial de Ucrania”.
En los últimos años Ucrania prohibió varios de sus libros, en particular “Ucrania. Mi guerra. Diario geopolítico” y “Revancha euroasiática de Rusia”.
Dugina era periodista y politóloga y defensora de la ofensiva rusa en Ucrania.
En marzo de 2022, después del comienzo de la “operación militar especial” rusa en Ucrania, su fallecida hija también fue sancionada por EU por su labor como directora de la web United World International (UWI), calificada por Washington como “un medio de desinformación”.
En tanto, los líderes de Estados Unidos, Francia, Alemania y Gran Bretaña pidieron “contención” militar cerca de la central nuclear ucraniana de Zaporiyia, la más grande de Europa, ocupada por Rusia.
En conversación telefónica, pidieron el envío “rápido” al lugar de una misión de inspectores de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA).
PIOTR TOLSTOI VICEPRESIDENTE DE LA DUMA “Este crimen (de Daria Duguina) no puede quedar impune (...) hay que responder con dureza y decisión (contra el gobierno de Ucrania)”