Uso de cubrebocas ya es voluntario
La mayoría de capitalinos entrevistados señalan que aún lo portarán en el transporte público
CDMX. Luego de más de dos años con el uso de cubrebocas obligatorio, el Gobierno de la Ciudad de México informó que a partir de ayer será voluntario y lo recomienda cuando no exista sana distancia o adecuada ventilación en lugares cerrados, así como en personas adultas mayores o con problemas de salud.
A través de la Gaceta Oficial, la administración capitalina publicó lo siguiente: “Los establecimientos mercantiles y oficinas, tanto gubernamentales como privadas, espacios culturales, así como cualquier otra instalación, deberán observar las siguientes medidas generales de protección a la salud:
“Uso voluntario de cubrebocas en espacios abiertos; o bien, en espacios cerrados cuando exista sana distancia y adecuada ventilación”.
Lo recomienda en los siguientes casos: “Espacios cerrados cuando no exista sana distancia o adecuada ventilación; lugares de alta afluencia de personas, como escuelas, transporte público u hospitales; actividades o espectáculos públicos en espacios cerrados”.
También sugiere su uso en “personas adultas mayores, personas con enfermedades respiratorias, personas con patología crónica o inmunodepresión; personas sospechosas o confirmadas de Covid-19; y personas que decidieron no vacunarse”.
DEJAR DE PORTARLO, UNA DECISIÓN DIFÍCIL
Germán visita el Zócalo acompañado de su esposa, ambos traen cubrebocas; “a mi parecer es precipitada la decisión de no usarlos, ahorita se viene temporada de invierno, habrá muchos enfermos por el cambio de temperatura y no sabemos cómo se vaya a poner el Covid, la verdad nosotros lo seguiremos usando”, platica.
Por otro lado, Alberto, quien visita la Feria
Internacional del Libro, comenta que ya esperaba dejar el cubrebocas; sin embargo, en lugares como el transporte público lo considera necesario: “Se siente muy bien estar así, es molesto todo el tiempo estar con cubrebocas, pero por ejemplo en el transporte que es donde se concentra la gente, creo sigue siendo necesario”, dice.
Elena se contagió de Covid-19 y por las secuelas se le complica respirar y más difícil le es con cubrebocas, por lo que celebra que ya no sea obligatorio, pero porque sufrió la enfermedad no piensa tomarlo a la ligera y en espacios cerrados lo seguirá usando: “Fue tan difícil mi recuperación que me da miedo, así que en lugares cerrados lo seguiré usando”.
EL GOBIERNO sugiere su uso en espacios cerrados cuando no exista sana distancia o ventilación, así como en adultos mayores