Planean un nuevo rescate de Zona Rosa
Está afectada por la pérdida de habitantes y el deterioro de edificios
La Zona Rosa ya no será “un perfume barato en un envase elegante” como Vicente Leñero la describió en la década de los 70. El gobierno de la ciudad la renovará a partir de nuevos desarrollos y el mejoramiento de su imagen.
Esta semana, la actual administración capitalina publicó el Plan Maestro de la Zona Rosa, un documento que regula su próxima transformación y contrarresta la pérdida de habitantes además del deterioro de sus construcciones.
Según este plan maestro, en los últimos 10 años la Zona Rosa perdió 16 por ciento de sus habitantes y de continuar la tendencia se convertirá en un polo que concentra actividades de comercio y recreación sin población habitante. Y los 884 predios que la conforman presentan diversas características y estados de conservación por la falta de mantenimiento que deriva en el abandono, su utilización, mal aprovechamiento o demoliciones ilegales.
Para revertir el problema, el gobierno local permitirá conjuntos de vivienda nueva, en venta y en renta para los sectores de medianos y bajos ingresos dentro del polígono delimitado por Paseo de la Reforma, Insurgentes, Avenida Chapultepec y Lieja. “Tomando en cuenta que la mayoría de los inmuebles son de propiedad privada, el sector privado debe de ser el principal actor a considerar para que este sector se encuentre en posibilidad de realizar proyectos que sean redituables y atractivos para la inversión y rescate de esos elementos”, dicta el plan.
Como en esta zona de la colonia Juárez no hay predios vacíos, la nueva propuesta es que los actuales dueños de inmuebles opten por la reconversión, demolición, reconstrucción, adecuación o reducción del espacio libre de esos inmuebles.
El plan también enlista una cartera de proyectos generales para mejorar la imagen urbana: ampliación de banquetas y renovación de jardineras, la implementación de jardines infiltrantes en Sevilla, ciclovías en Lieja y Varsovia en sus tramos de Refoma a Chapultepec, y un nuevo biciestacionamiento masivo en la Glorieta de Insurgentes.
“El barrio mantiene una relevante actividad como espacios de reunión y esparcimiento de personas jóvenes y de la comunidad LGBT+ así como de oficinas y diversos servicios. El Plan Maestro zona Rosa plantea una intervención estratégica de carácter urbana”, se lee en el plan.
La autoridad que estará a cargo de tramitar los proyectos será la Secretaría de Desarrollo Urbano, quien a su vez someterá cada uno a la discusión de un comité técnico integrado por las secretarías de Movilidad, Gestión de Riesgos, Medio Ambiente y el Sistema de Aguas.
EL PLAN también contempla controlar el comercio informal ubicado en las calles que salen hacia Sevilla y la Glorieta de Insurgentes
“En términos generales es poder redensificar la Zona Rosa”
CLAUDIA SHEINBAUM
HISTORIAL
En 2007 inició el primer proyecto de rehabilitación de la Zona Rosa planteado para el nuevo milenio. Consistía en la mejora de imagen urbana primero del circuito que forman Génova, Copenhague y Hamburgo y luego del resto de las calles. Un año más tarde la Asociación de Comerciantes de la Zona Rosa y los vecinos solicitaron al gobierno no seguir adelante con la renovación debido a que las obras tardaron mucho en comenzar y afectaba los accesos a comercios y viviendas.
Para 2012 se proyectó un parque lineal en Avenida Chapultepec y mover las palmeras de Florencia para dar visibilidad al Ángel de la Independencia. El parque lineal fue rechazado por vecinos de la zona.
En 2016 vino un nuevo plan de rescate. El entonces secretario de Desarrollo Económico de la Ciudad de México, Salomón Chertorivski, afirmó que se regularizarían comercios y se mejoraría la seguridad. Se concretó hasta 2018 cuando iniciaron obras menores de renovación.
Fue hasta 2020 cuando comenzó la remodelación de Avenida Chapultepec, el límite de la Zona Rosa, y en 2022 la alcaldesa en turno, Sandra Cuevas, anunció un proyecto para convertirla en el nuevo Las Vegas que nunca prosperó.