Alumno ahogado quería ser piloto
El joven murió junto a su compañera el pasado sábado en la laguna de Tecocomulco
Luego de que el pasado sábado dos estudiantes del Cobaeh de Tecocomulco, en Cuautepec, perdieran la vida al ahogarse en la laguna de dicha localidad, la madre del joven contó que contrario a lo que manejan rumores en redes sociales la tragedia no había sido fruto de un descuido por ingesta de alcohol, según arrojaron resultados de la autopsia.
La señora Martha Pérez, oriunda de la comunidad de La Palma, relató que su hijo Horacio salió desde temprano porque acudiría a una actividad extraescolar que forma parte del plan de estudios en dicho plantel educativo, razón por la que incluso dejó un trabajo pendiente en casa, ya que se dedican al campo. Se fue en un auto viejo que ocupaba ocasionalmente con rumbo a la laguna y al término de su compromiso académico es cuando ocurrió:
Una de sus compañeras estaba en el agua, al borde del ahogamiento. Aún sin saber nadar, Horacio decidió meterse para salvarle, no obstante ambos perdieron la vida. El cuerpo de ella quedó flotando, mientras que el de él se fue al fondo del jagüey. Ante la situación, otros estudiantes que atestiguaron el fatídico momento corrieron a llamar a los servicios de emergencia, algo que se complicó debido a que la recepción telefónica en la comunidad no es la mejor y esto siempre dificulta la situación para llamar.
Así fue que llegaron elementos de Protección Civil que de acuerdo con testimonios, y al parecer “no hicieron lo propio”, ya que se desconoce si intentaron reanimar el cuerpo de la joven.
Señala que no fue por ingesta de alcohol como se ha estado manejando en las redes sociales
Por otro lado, fueron los pescadores quienes con sus limitados recursos y herramientas se treparon a las lanchas en busca de Horacio. Tanto él, como su compañera Esmeralda, fallecieron dentro del agua. El muchacho fue recordado en la misa en su honor que se llevó a cabo el lunes, donde fue aplaudido por haber sido un “gran amigo” y una persona siempre “dispuesta a ayudar”, según relató su madre, quien espera encontrar resignación próximamente para hacer frente a la ausencia de su hijo, que soñaba con ser piloto aviador y que estudiaba el quinto semestre de preparatoria.
De diecisiete años, trabajador, buen amigo y con el sueño de ser piloto aviador, así recordará la comunidad de La Palma a Horacio, según lo contó su madre, doña Martha Pérez, a escasos tres días de que falleciera su hijo tras haberse ahogado en las aguas de la laguna de Tecocomulco.
Fue el sábado cuando luego de que concluyeran las actividades paraescolares del Cobaeh de la localidad, Horacio se desvió de su regreso a casa para ir a recoger unas cosas que había prestado a otros alumnos. Ahí y al ver que su compañera se ahogaba, tomó la decisión de lanzarse para salvarla. Ninguno salió con vida.
Así es como la señora relata una versión que le contaron testigos del hecho, compañeros del plantel educativo, de los cuales no se dieron nombres. De acuerdo con ella, los muchachos corrieron a llamar a las autoridades en cuanto notaron que algo iba mal y que no salía ninguno del agua.
La teoría es simple: Horacio, en su afán por ayudar, se metió al jagüey sin saber nadar; posiblemente la muchacha en su desesperación por oxígeno, terminó por hundirlos a ambos. Tarde, debido a la dificultad para encontrar red telefónica en el pueblo, arribaron los servicios de emergencia de Protección Civil para intentar rescatar al par de jóvenes.
No obstante, pobladores contaron que
MARTHA PÉREZ
“No se trata de lucrar con la muerte de mi hijo, eso simplemente no tiene precio. Es la gente que voluntariamente nos apoya”
los paramédicos solo daban vueltas e intentaban comunicarse por teléfono en lugar de sacar los cuerpos. Esto despertó la ansiedad de pescadores que atestiguaron el hecho, quienes se treparon a sus lanchas y comenzaron a buscar entre el fango y maleza de la laguna.
Doña Martha llegó al lugar más o menos en este momento, cuando el cuerpo de su muchacho ya estaba fuera, sin vida y tendido sobre la yerba.