Envían más migrantes al domicilio de Harris
Unas 130 personas fueron dejadas desde Texas en autobuses vestidos sólo con camisetas; el frente frío deja 28 muertos y vuelos cancelados
WASHINGTON. Más de un centenar de inmigrantes fueron dejados en las cercanías de la residencia de la vicepresidenta Kamala Harris en Washington durante el fin de semana de Navidad, marcado por temperaturas bajo cero, luego de que fueron llevados en autobús desde la frontera suroeste de Texas.
Aproximadamente entre 110 y 130 de los migrantes que buscan asilo en Estados Unidos, muchos de ellos familias con niños, fueron colocados en autobuses por funcionarios de Texas, dijo Tatiana Laborde, directora gerente de SAMU First Response, una agencia de ayuda que trabaja con la ciudad de Washington, D.C.
Las personas que descendieron de los buses fueron rápidamente atendidas por organizaciones sociales que desde hace meses ayudan a estos migrantes con ropa, comida y refugios.
Algunos llegaron a Washington vestidos sólo con camisetas en plena tormenta invernal que ha azotado al país provocando las Navidades más gélidas en décadas, informó la CNN.
Laborde comentó que los grupos de ayuda habían sido informados de su viaje y esperaban su llegada a última hora del sábado para repartir mantas y luego transportarlos a una iglesia en el barrio de Capitol Hill de la ciudad.
El gobernador republicano, un firme crítico de las políticas de inmigración del Gobierno del presidente Joe Biden, y algunos otros gobernadores republicanos han estado transportando migrantes a ciudades controladas por los demócratas en el norte de Estados Unidos.
Texas ha transportado en autobús a miles de inmigrantes a Washington, Nueva York y Chicago, en lo que algunos críticos han calificado de maniobra en medio de un debate nacional sobre el elevado número de llegadas de inmigrantes a la frontera sur de Estados Unidos.
Laborde dijo que en la última semana, nueve autobuses cargados de inmigrantes han sido dejados en Washington.
“Últimamente, lo que hemos estado viendo es un aumento de personas procedentes de Ecuador y Colombia”, dijo Laborde. Anteriormente, muchos venezolanos llegaban en autobús, añadió.
La acción del gobierno texano se dio a pesar del clima extremo que impera en todo Estados Unidos, con nevadas y temperaturas de hasta -48oC, lo que provocó la cancelación de miles de vuelos y volvió intransitables muchas carreteras en la ajetreada temporada de viajes por las fiestas de fin de año.
Veintiocho personas han muerto hasta ahora en incidentes relacionados con el clima en todo el país, según un recuento de NBC News.
El número de muertos por la tormenta aumentó de tres a siete durante la noche en la región de Buffalo, en el extremo occidental de Nueva York, donde la nieve acumulada ayer alcanzó casi 1.2 metros.
Algunos de los cuatro muertos de los que se informaron el domingo por la mañana fueron encontrados en coches y otros en bancos de nieve.
El temporal, provocado por un frente de aire ártico, comenzó a amainar tras dejar a su paso temperaturas bajo cero desde Canadá hasta Texas, además de intensas nevadas y fuertes vientos que han afectado a la red eléctrica y a la aviación.
En pleno día de Navidad, unos 200 mil usuarios seguían sin luz, mientras que cerca de 3 mil vuelos fueron cancelados.
En el sur de Florida, las iguanas caían de los árboles, paralizadas a causa de la brusca bajada de las temperaturas hasta los 7 grados centígrados.