Laneros piden mayor visibilidad
Falta de apoyos gubernamentales, así como de difusión y defensa de la artesanía local son las problemáticas que exhibió Odilón Rodríguez, lanero originario de Tulancingo y que se ha desempeñado en esta disciplina desde hace más de 50 años. De generación en generación, dichos conocimientos basados en la confección de lana comenzaron hace más de medio siglo con su abuelo y con el paso del tiempo se traspasaron a sus sobrinos y familiares.
Su labor se basa en comprar lana de los productores ovinos provenientes de las comunidades aledañas de Tulancingo, para después procesarlas en su taller. Aquí, tras lavarla y acondicionarla, confeccionan diferentes prendas tales como chalecos, gorras, suéteres, entre otros. Después, se exhiben en su negocio, ubicado en las mismas instalaciones donde desde hace años está su taller.
"Los tiempos cambiaron y ahora la gente prefiere ir a las tiendas a comprar ropa que cuesta menos pero dura menos tiempo. Nuestras prendas son un poco más caras pero garantizan un tiempo de vida de al menos 12 años. Lo barato sale caro", expresó en entrevista al respecto de la baja en ventas que se vive prácticamente en todo el mercado artesanal.
Sin embargo y pese al romanticismo que se imprime a la producción, el señor Odilón refiere que poco se hace desde las instancias gubernamentales o dependencias burocráticas culturales para apoyar esta disciplina, pese a que en el viejo Tulancingo tenía una popularidad alta.
"El gobierno no nos da el apoyo debido, cuando nos dan espacios nos mandan a lugares donde ni pasa gente, no hay eventos
Artesanos tulancinguenses aseguran no recibir los apoyos necesarios del gobierno para mostrar sus productos
para los auténticos productores. Abren espacios pero se los dan a gente de fuera que no producen como tal, son revendedores y ese no es el chiste, el chiste es apoyar a la gente que produce aquí.", mencionó.