CdMx, el bastión en riesgo
El tiempo es más importante que el espacio, es decir, identificar cuándo es el mejor momento para actuar en la toma de decisiones.
La vida política de la Ciudad de México pareciera estar enmarcada por el símbolo del infinito, es tal el dinamismo político, económico y social que jamás se detiene, a pesar de ello 9 alcaldías se encuentran gobernadas por la oposición más visible del país, es belicosa y generadora permanente de batallas caóticas, en la mayoría de los casos sin mayor consecuencia.
Se requiere de un ejercicio de memoria corta para recordar a la ciudadanía lo que representa la oposición en México, son ellos los herederos del desprestigio moral, los que afanosamente buscaron privatizar a toda costa las empresas de gobierno, así como la tierra de campesinos, la educación, la salud, incluso la seguridad, son los que en perjuicio del pueblo convirtieron deudas públicas en privadas.
También son la oposición actual, legatarios de las políticas públicas donde se creó una plataforma para el aniquilamiento de los grupos más vulnerables, jamás se tuvo como prioridad rescatar a los pobres del país, pero sí a los bancos, sí a las carreteras, sí a desmantelar la red ferroviaria para beneficiarse a través de la colusión del poder público y el poder económico.
Son también los protagonistas de las peores vergüenzas de corrupción desde el Arturo el Negro Durazo, hasta García Luna, pasando por los Duarte, Borges, y otros más que dieron a México las peores calificaciones otorgadas por los mecanismos de medición de corrupción e impunidad.
Es también la oposición conservadora la responsable de la cosecha de violencia, inseguridad y sangre que se vive en todo el país, el sicariato se ha convertido en la nota diaria desde hace 25 años por lo menos a la fecha.
Es el mismo grupo que, como asesinos a sueldo, conservaron las plumas, micrófonos e imágenes de pseudoperiodistas pagados con jugosísimos presupuestos públicos, la verdad desapareció, la simulación mediática con olor a erario.
Esta oposición sin embargo, gobierna nueve alcaldías, esa es nuestra realidad, muy a pesar del pasado de quienes los procrearon políticamente, los peores momentos
Se requieren aspirantes con frescura, que conquisten el corazón de los chilangos, que tengan la capacidad de convencer a los insatisfechos.
históricos y los infortunios más dolorosos que se dieron en el periodo neoliberal, aun así la gente votó por ellos.
¿Qué tanto han cambiado las condiciones políticas y el ánimo electoral en la Ciudad de México? ¿Qué tanto se ha hecho localmente para revertir los resultados del 2021? ¿Cómo mantener la jefatura de gobierno con una ideología de izquierda? Son preguntas que muchos nos hemos hecho.
Se requieren aspirantes con frescura, que conquisten el corazón de los chilangos, que tengan la capacidad de convencer a los insatisfechos, que su presencia física y discursiva aliente la unidad y permee su mensaje en todos los sectores de la capital de todos los mexicanos; con los empresarios, en las universidades, en los templos, con las organizaciones sociales, con los sindicatos, con los líderes legítimos de los pueblos y barrios originarios; alguien que no requiera discursos escritos para debatir, que se atreva a exponerse ante sus rivales más allá de los eventos organizados por el INE. Hoy la o el candidato es el que cautivará, es el que puede recuperar el terreno cedido, si fuera estrategia parecería una retirada inteligente para contraatacar, pero no es así, la ciudad se perdió a la mitad por falta de activismo político y liderazgos, y por ofrecer lo mismo de siempre.
La Ciudad es nuestra, nos pertenece a los que nacimos y vivimos aquí, y nosotros somos quienes decidiremos su futuro, que paradójicamente es una premonición para los años venideros, por ello se convierte en vital que la CdMx mantenga su sentido transformador, progresista, patriota y plural.
Feliz año 2023.