Nueva ley Conahcyt, para el desarrollo
Desde hace 40 años, los esfuerzos en materia científica y tecnológica no han tenido resultados visibles en la estructura productiva nacional, ni aportación alguna notable al conocimiento científico internacional.
Antes del periodo neoliberal, México destacaba en materias como ingeniería petrolera, ingeniería civil, medicina, química, entre otras. Durante este periodo se aceptaba la rectoría del Estado como instrumento de desarrollo, y se esperaba que la ciencia y la tecnología estuvieran al servicio de los intereses nacionales. Con esa idea se crearon el CONACYT, la Ley de Inversión Extranjera, la Ley de Invenciones y Marcas, el Instituto Mexicano de Comercio Exterior y otras instituciones.
Con el neoliberalismo, la intervención del Estado en la economía se consideró dañina, así que la tendencia en las universidades y centros públicos de investigación se abocó a fines “académicos”, como publicar en revistas indizadas, principalmente de países anglosajones o nacionales con el mismo formato, con agendas no necesariamente útiles para el desarrollo nacional.
Actualmente en México, la iniciativa de Ley en materia de Humanidades, Ciencia, Tecnología e Innovación pretende una estrategia similar. Se parte de que el Estado recupere su carácter de Rector de la Economía para diseñar y ejecutar estrategias de desarrollo de capacidades tecnológicas propias y permitan un crecimiento acelerado de la economía. Por tal motivo, y para darle la debida importancia, el órgano supremo “Consejo de Estado” estará dirigido por el Presidente de la República, y su brazo instrumental será el nuevo Consejo Nacional.
El Conahcyt involucrará a secretarías de estado, universidades y centros públicos de investigación. La iniciativa de Ley establece que la ciencia y tecnología financiadas por el Estado sean “un derecho humano”, es decir, que coadyuven al bienestar del pueblo de México.
Por primera vez se contempla la obligación de aportar beneficios dirigidos al sector informal con programas de “economía social y solidaria” que ayuden a paliar la pobreza y desigualdad en la población; en tanto, que el sector moderno se desarrolle, y en el mediano y largo plazo los absorba. Por tales motivos, considero que esta propuesta abre la puerta para fomentar el crecimiento de la economía y el desarrollo del país.