Adaptaciones litúrgicas indígenas MIRAR.-
Con el objetivo de avanzar en el proceso de inculturación de la Iglesia en los pueblos originarios y de asumir en la celebración de la Santa Misa algunos elementos de las culturas tseltal, tsotsil, ch’ol y tojolabal, de origen maya, que se usan ampliamente por casi millón y medio de indígenas locales, la diócesis de San Cristóbal de Las Casas, en días recientes, promovió una reunión de su equipo de agentes de pastoral con la Comisión Episcopal de Pastoral Litúrgica, presidida por Mons. Víctor Sánchez, arzobispo de Puebla, y con el Dicasterio para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, representado por Mons. Aurelio García, subsecretario de dicho Dicasterio.
Se analizaron diversos ritos, como la entrada a la Misa, la oración de los fieles, la incensación por parte de mujeres, el ministerio o servicio del principal (varón o mujer que animan la participación de la comunidad), la siembra de candelas como forma cultural de orar, la danza ritual, que no es folklórica sino de profunda comunicación con Dios. Todo eso no es invento clerical, ni ocurrencia de unos cuantos, sino fruto de la experiencia de vivir por años con estos pueblos su forma de comunicarse con Dios, y que no tiene ninguna contradicción con los ritos litúrgicos de la Misa. No se trata de inventar un nuevo rito indígena, sino de integrar en la liturgia varias formas de esos pueblos de relacionarse con Dios y que expresan lo mismo que el rito romano, pero en su forma cultural. Todo esto se presentará a la posible aprobación del episcopado mexicano y de la Santa Sede.
Hace poco más de dos años, el Papa Francisco me regaló este libro: “Papa Francesco e il Messale Romano per le Diocesi dello Zaire”, en que se narra el proceso para llegar a la aprobación de ritos africanos en la Misa, y me animó a que sigamos este camino de inculturación de los ritos indígenas en la celebración litúrgica, no sólo de la Misa, sino de toda la liturgia católica.