Santos son íconos de fe
La fe católica contempla más de diez mil personas que según su historial de acciones cuando estaban vivos, han alcanzado cierta gracia y divinidad ante los ojos de Dios. Es en esta virtud y tras un proceso encabezado por el papa Francisco, máxima autoridad eclesiástica en el catolicismo, que se les otorga el grado canónico que extiende su culto en cierta nación o incluso localidad.
En entrevista, el ministro Salvador Osnaya, titular de la providencia de Misioneros Josefinos en México, expresó que para que el grado de "santo" pueda otorgarse es necesario cubrir con un proceso llamado de canonización. Esto, en otras palabras, es cuando la Iglesia reconoce que dichas personalidades ya gozan de "estar en presencia de Dios", pues se piensa
La fe
católica contempla más de diez mil personas con cierta divinidad
acorde con la creencia religiosa, que ya se encuentran en el Paraíso.
Para tal fin, es importante que quienes propongan al futuro Santo, presenten ante la Santa Sede (el Vaticano) un informe detallado sobre la vida y virtudes de la persona que busque santificarse. Esta información se pondrá bajo escrutinio de un consejo llamado Congregación para las Causas de los Santos.
A la par, en Roma recibirán testimonios de aquellos dicen conocer al candidato y den fe no solo de sus acciones bien encaminadas, también de la justificación del porqué merece obtener el grado. En caso de que se avale, el Papa en turno deberá otorgar su visto bueno a través del "Decreto de Heroicidad de Virtudes", desde donde se le reconocerá como "venerable".
Los santos son personas a las cuales la Iglesia reconoce como presentes en el paraíso