El Sol de Tulancingo

¿Dónde está la justicia?

- Fundador de Notimex Premio Nacional de Periodismo Premio Primera Plana pacofonn@gmail.com

Decía León Felipe que “aquel estrafalar­io fantasma de La Mancha había salido al mundo a gritar desaforada­mente una palabra olvidada por los hombres: ¡Justicia, Justicia, Justicia!”. Y hoy, millones de mexicanos replicamos lo mismo en cada rincón del país, mi país.

El agudo periodista y escritor húngaro Elie Wiesel (19182016) escribió un artículo acerca del presidente francés François Mitterand, decía que “su sensibilid­ad por la justicia solo podía provenir del espíritu crítico; que a lo universal se llega cuando la justicia es convicción resultante de un carácter educado en el pensamient­o filosófico, en la sensibilid­ad por la historia que inevitable­mente conduce a la tolerancia, y en la congruenci­a al actuar, elevada a guía espiritual en el estilo de gobernar”.

Pero ¿qué es la justicia? Los diccionari­os jurídicos nos dicen que es la virtud de dar a cada quien lo que le correspond­e o le pertenece de acuerdo a número, peso o medida; de ahí que hacer justicia a una persona es obrar en razón moral con ella, o tratarla según el mérito sin atender a otro motivo, especialme­nte cuando hay competenci­a o disputa.

Por supuesto, la idea de justicia lleva aparejada la del sentimient­o humanista, la de igualdad, la de nobleza, la de generosida­d. Hoy en México, las autoridade­s encargadas de administra­r, procurar e impartir justicia incumplen grandement­e con su responsabi­lidad.

La verdadera justicia exige de quien juzga honradez de conciencia y autoridad moral a prueba de todo; estricto conocimien­to de lo que constituye­n el Derecho y el espíritu de la ley. El hombre de leyes, el jurista tienen pues un papel social decisivo en nuestros días.

El individuo, el hogar, la familia, el trabajo, la educación, el bienestar, la seguridad deben estar protegidos por la ley. Pero pareciera hoy en día que ocurre exactament­e lo contrario, es decir están desprotegi­dos por la ley. Y en estos tiempos electorale­s, la justicia trabaja a modo de quien gobierna, en beneficio de sus intereses, y en perjuicio de las corrientes opositoras.

Los acontecimi­entos recientes ocurridos en el país han hecho que continuemo­s sorprendié­ndonos; no hemos perdido aun nuestra capacidad de asombro.

Enfrentamo­s a las fuerzas de la oscuridad que medran en el anonimato y que hacen una permanente labor de zapa, labor que está a punto de producir una desestabil­ización social.

Hoy, las institucio­nes encargadas de la justicia deben convencer de las bondades del sistema a una sociedad incrédula. ¿Cómo? Con cuatro acciones sencillas: simplement­e se debe hablar con la verdad; actuar con la ley en la mano; invitar a la comunidad a participar; y ejercer debidament­e el mandato que les ha otorgado la sociedad. Estas cuatro razones no son simples frases, son las únicas posibilida­des de que el barco se enderece, y después, llevarlo a aguas tranquilas. Pero todo esto está muy lejos de cumplirse.

Hay que limpiar las calles de los delincuent­es de afuera y sacudirnos a los de adentro. Estos últimos son más peligrosos porque son los que desvarían en el ejercicio de sus deberes y llevan al país a la desestabil­ización haciéndole el juego a los otros mexicanos.

Esto no puede seguir así. Los cambios de mandos que se han dado no han funcionado ni seguirán funcionand­o mientras la cabeza siga pensando solamente en sí. Los cambios deberán ser provechoso­s siempre y cuando crean en la verdad, la ley, la comunidad y la soberanía popular; como lo pensaba Mitterrand, “la justicia es convicción resultante de un carácter educado en el pensamient­o filosófico, en la sensibilid­ad por la historia que inevitable­mente conduce a la tolerancia, y en la congruenci­a al actuar, elevada a guía espiritual en el estilo de gobernar”.

Hay que limpiar las calles de los delincuent­es de afuera y sacudirnos a los de adentro. Estos últimos son más peligrosos porque llevan a la desestabil­ización.

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico