“Quizá vengan tiempos más complicados”
Sigifredo Noriega: aún no hay fechas para que las misas regresen de manera presencial
El obispo Sigifredo Noriega pidió a la gente calma, no rompan filas, autoridades han visto necesario dar un paso, asomarse, pero no saquen todo el cuerpo.
El obispo de la Diócesis de Zacatecas, Sigifredo Noriega Barceló, pidió a la gente calma, “no rompan filas, nuestras autoridades han visto necesario dar un paso, empezar a asomar la cabeza, pero no saquen todo el cuerpo, necesitamos trabajar, necesitamos movernos, pero también hay mucha incertidumbre porque no sabemos qué va a pasar, quizá vengan tiempos más complicados todavía y haya más gente contagiada”.
Dijo que las realidades que vivimos imponen; antes lo veíamos todo de arriba para abajo, las realidades nos están hoy presionando para que veamos la vida desde abajo.
Para que elevemos la mirada sí, pero para que no despeguemos los pies de la tierra, de la realidad.
Cada familia va construyendo la historia, y esa historia tiene muchas historias, personas, diferentes estados de vida, en diferentes situaciones; en general, nos estamos preparando para dar un paso difícil, riesgoso, porque después de más de dos meses estamos cansados, pero el confinamiento nos puede enfermar más, quizá.
Por eso nuestras autoridades han visto necesario dar un paso, empezar a asomar la cabeza, no saquen todo el cuerpo, por favor.
Es empezar a asomar la cabeza para ver qué hay, qué vamos a hacer, necesitamos trabajar, necesitamos movernos, ya en otra situación con mucho aprendizaje por delante todavía, pero también con mucha incertidumbre porque no sabemos qué va a pasar.
Quizá vengan tiempos más complicados todavía y haya más gente contagiada.
El obispo quiso acompañar a todas las personas que están sufriendo en este momento la pérdida de un ser querido, cada uno tiene un familiar, un vecino, un amigo o nos damos cuenta, aunque no conozcamos a las personas.
Es una historia dolorosa, difícil de asimilar a la primera, aquí titubeamos, por eso desde aquí como iglesia los abrazamos, si sus seres queridos no han podido tener unas exequias como hubiéramos querido la iglesia ora por ustedes y ora con ustedes.
Hay mucha gente, vemos las cifras, los números y corremos el riesgo de no ponerles nombre y no tomar en cuenta la historia de una vida.
Por eso tengan esa confianza, nuestro abrazo en la caridad, en esperanza, en la fe.
Qué va a ser de estas personas que han fallecido, que va ser de estas familias, cuál va a ser el futuro, la ausencia, la separación, el sufrimiento que esto causa, la adversidad, las tragedias que se van sumando, las situaciones difíciles que tenemos que afrontar cada día a veces pudieran desesperarnos.
Que Dios tenga en su santa gloria a estas personas que no hemos podido darles una sepultura o una despedida como hubiéramos querido.
REGRESO DE LAS MISAS
En cuanto a la preparación para lo que algunos le llaman la Fase Cero, pidió a quienes estén desesperados que se calmen, “no rompan filas, cada estado va a dar sus indicaciones”.
Es muy difícil decir cuándo se van a reiniciar las celebraciones litúrgicas con el pueblo de Dios presente en los templos.
No sabemos cuándo, porque esto depende de la evolución de la pandemia, aunque ya hay la fechas, etiqueta pero no significa que ya partir del del primero de junio ya se pueda hacer todo, hay que preparar nuestro ánimo, nuestro espíritu, hay que preparar los que tienen que abrir comercios, hay que prepararse, los que tienen que abrir templos tal vez se abran pero sin culto todavía, que la gente vaya poco a poquito con toda las instrucciones recibidas, que vaya a rezar.
Catedral tiene capacidad para 1 mil personas, a lo mejor cuando se abra para celebrar la eucaristía para todos haya espacio para un 30 por ciento, en una segunda fase quizá para un 50 por ciento, hasta que lleguemos a la tercera fase, si es que llegamos.
No hay fecha todavía, por eso pues hay que tener mucho cuidado, poco a poquito ir abriendo la puerta, pero antes hay que abrir las ventanas.
AMANC
El obispo de la Diócesis de Zacatecas, Sigifredo Noriega Barceló, hizo una intención especial por un grupo muy especial que, durante 19 años aquí en Zacatecas, ha servido a los niños con cáncer, AMANC:
Obviamente un niño, detrás de un niño, junto a un niño hay una familia, es una forma de realizar la misión, con esa tarea, tarea difícil, por eso abrazo con todo el corazón a todas estas personas, es puro voluntariado y así como este grupo que trabajan en equipo, porque no es labor de una sola persona e inspira a muchas otras personas, hay muchos otros grupos.
Hoy estamos hablando de héroes y de heroínas, están ahí, son nuestros vecinos, vayan a todas partes, sean un Evangelio viviente, irradien la alegría, la esperanza del Evangelio.
“Cada una de las familias está construyendo una historia”. SIGIFREDO NORIEGA, OBISPO DE ZACATECAS.