¡Con las faldas bien puestas!
Al fin, algunas senadoras de la oposición, le cantaron sus verdades al inefable Hugo López Gatell. Zar de la pandemia del coronavirus. Sus justos reclamos, que dieron voz a lo que piensa un enorme segmento de la sociedad, se frustraron por lo que se convierte en costumbre morenaca: tronar la comparecencia, para proteger al funcionarete en turno.