Loma-teófimo: se espera una guerra
Teófimo López y Vasiliy Lomachenko no tuvieron problemas para marcar el tope de las 135 libras para su megacombate sabatino en Las Vegas, el cual ha llegado al punto de una rivalidad al rojo vivo. Al momento del cara a cara junto a la báscula instalada en la Burbuja del MGM Grand, se dirigieron palabras y miradas taladrantes.
La antipatía entre los prestigiados contendientes fue exacerbada por las declaraciones, incluso en tono insultante, que el Júnior (así llaman afectuosamente al papá de Téófimo) y el mismo púgil de raíces hondureñas extenaron hacia Lomachenko y su padre y entrenador, Anatoly, desde antes de pactarse este duelo. Anatoly fue Entrenador del Año en el lapso de 2018 para la Asociación de Escritores de EU, pero el Júnior se autoproclama como “el mejor”.
Cabe decir que Lomachenko “puso” o sacrificó parte de su bolsa, inicialmente valorada en cuatro millones de dólares (se supo que concedió 750 mil “billetes verdes”), para que el sueldo de Teófimo subiera a 2MDD y que el pleito fuese posible.
Los golpes podrán verse por ESPN, Space y (en México) por Box Azteca.
Lopez, hijo de inmigrantes hondureños, consiguió el fajín de la IBF al triturar en el segundo asalto al ghanés Richard Commey, en diciembre pasado. Exhibe 15 victorias (12 nocauts), sin derrota, y está confiado en mantenerse invicto ante un poderoso rival que lleva consiguiendo títulos mundiales desde 2014. “Le daré una paliza a Lomachenko y le quitaré los cinturones. Así de simple”, dijo un amenazante Lopez. “No me gusta el tipo y me voy a divertir mientras la cara de Lomachenko queda golpeada y marcada por mis puños”, comentó.
Vasiliy Lomachenko, que defiende por cuarta vez el título de las 135 libras de la WBA que le arrebató al venezolano Jorge Linares en 2018 (conquistó la versión de la WBO), se encogió de hombros ante estas palabras /