Entra al quite por las mujeres
CDMX. Cada vez que Asunción Sandoval escuchaba que otra mujer indígena rechazaba un cargo público en Cacalotepec, Oaxaca, o inscribirse a una candidatura política por un partido, ella era la primera en decir “tenemos que entrar al quite, porque ha sido mucho tiempo el que hemos sido relegados”. Ahora que en Movimiento Ciudadano se lo propusieron, aceptó luchar por los derechos de las mujeres, los indígenas y llevar la voz de las jóvenes feministas al congreso de Oaxaca.
“Mujer Ayuuk, mamá, activista, abogada y feminista”, así se define la joven de 32 años ante su comunidad de poco más de dos mil 500 habitantes, que busca representar a un total de 130 mil personas que habitan en ese distrito X de Asunción Cacalotepec.
Asul, como la conocen entre amigos y familiares, regresó hace poco más de un año a San Miguel Campo México, una de las ocho agencias de ese municipio, con su hija de dos años.
Sus primeras letras las aprendió de una joven preparatoriana que llegó hasta la agencia municipal para formar a cinco niños bajo un techo improvisado, porque no había escuela. Para cursar la secundaria se trasladó a la cabecera municipal y al concluir tuvo que viajar a la capital oaxaqueña para ingresar al Colegio de Bachilleres. Más tarde eligió ingresar a la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales en donde se convirtió en abogada. Ahora es candidata de Movimiento Ciudadano a una diputación local. No se ha sentido discriminada dentro de su comunidad porque “todos somos indígenas”, pero afuera, ser mujer e indígena es suficiente para sufrir señalamientos. A ello se suman las críticas a su inexperiencia en la política, pero para ella es una oportunidad para posicionarse a sí misma y a su región.
Asul prefiere
visitar a los vecinos
que conocen la trayectoria de su padre como maestro