China avanza con su moneda digital
China está haciendo un progreso prometedor con las pruebas de su yuan digital. El país anunció el éxito de un piloto en la ciudad de Suzhou, cerca de Shanghai, donde 181 mil consumidores recibieron ¥ 55 (£ 6) de dinero gratis en billeteras digitales para gastar en los puntos de venta participantes en el festival de compras Double Fifth.
Esto fue parte de una prueba más amplia del Banco Popular de China dirigida a 500 mil consumidores en 11 regiones chinas desde abril. Para aquellos elegibles, hay una aplicación sencilla para descargar que les da una billetera, que utilizándola en las tiendas participantes les da descuentos.
El yuan digital es una versión de la moneda china normal desplegada en una cadena de bloques, que es la tecnología de contabilidad en línea a prueba de manipulaciones que sustenta las monedas digitales como el bitcoin. Sin embargo, esta cadena de bloques está autorizada, lo que significa que el Banco Popular decide quién puede usarla.
La última ronda de pruebas es diez veces mayor que la ronda original que tuvo lugar en el otoño del 2020. China también ha estado probando el yuan digital transfronterizo entre Hong Kong y la vecina Shenzhen, y está desarrollando una plataforma para hacer que la moneda sea internacionalmente viable.
Cada paso adelante aumenta la posibilidad de que China se convierta en el primer país en poner su moneda completamente en una cadena de bloques autorizada. No se ha anunciado una fecha, pero parece previsible un despliegue nacional en los próximos 12 meses, muy probablemente en etapas escalonadas.
Por el contrario, los bancos centrales occidentales como la Reserva Federal, el Banco de Inglaterra y, en menor medida, el Banco Central Europeo, se han estado moviendo más lentamente en las llamadas monedas digitales del banco central. Se preocupan por temas como la privacidad de las transacciones y por el efecto en los bancos minoristas.
De hecho, un yuan digital plantea profundas preguntas sobre la estabilidad financiera mundial. La duda para las otras economías importantes del mundo es cómo responder.
El yuan digital ya tiene la condición de moneda de curso legal. Los pagos que lo utilizan son fundamentalmente diferentes de los de plataformas de pago como Alipay o Wechat (o de hecho Paypal en el oeste). Dichos servicios pueden liquidar transacciones muy rápidamente para los clientes, pero detrás de escena hay libros de contabilidad de un gran número de transacciones entre los bancos de los compradores y vendedores y, a menudo, también los bancos intermediarios que liquidan horas o incluso días después.
El yuan digital pasa por alto la necesidad de estos bancos. No hay tarifa de servicio, a diferencia de estas alternativas de pago, y en teoría la velocidad de los pagos puede ser incluso más rápida.
A diferencia de las criptomonedas, esta se encuentra respaldada por un gobierno. Esto significa que la emisión de yuanes digitales es lo mismo que la emisión de efectivo en circulación, lo que la hace igualmente segura. Le da al gobierno un mejor control sobre la oferta monetaria, ya que a diferencia del efectivo, los funcionarios pueden ver todas las transacciones que tienen lugar.
Muchos bancos centrales han estado buscando desarrollar monedas digitales. Algunos como Japón y Corea del Sur no se quedan atrás. Y la Unión Europea está señalando que un euro digital podría tardar cuatro o cinco años.
Para los rezagados, existen varios peligros. El primero se refiere a los pagos internacionales. La mayoría de las transacciones entre diferentes monedas utilizan actualmente el dólar estadounidense como intermediario, a través del protocolo bancario internacional SWIFT. Esto significa una demanda considerable por el dólar estadounidense, lo que trae ventajas como permitir al gobierno de los Estados Unidos pedir prestado a un precio más bajo.
Las transacciones que utiliza el yuan digital no necesitarán SWIFT o el dólar, lo que tiene implicaciones para el uso del dólar en el comercio internacional. Hasta 120 países tienen a China como su mayor socio comercial, y muchos cuestionan la liquidación en dólares, ya que agrega el riesgo financiero innecesario de movimientos adversos del tipo de cambio. China dice que no está tratando de reemplazar el dólar y que el "objetivo es permitir que el mercado elija" cómo liquidar las transacciones internacionales.
Otro peligro es que si los bancos centrales no satisfacen la demanda de dinero digital, las fuerzas del mercado lo harán.
El yuan digital es una versión de la moneda china normal desplegada en una cadena de bloques, que es la tecnología a prueba de manipulaciones que sustenta a monedas como el bitcoin