El Sol de Zacatecas

10 de mayo

-

En esta semana se festejó el día de las madres. Segurament­e a muchas mamás las festejaron con comidas familiares y regalos. ¿Pero qué hay mas allá de esta algarabía? Abordemos este asunto desde la perspectiv­a biológica.

En la naturaleza, es importante que los organismos tengan descendenc­ia pues de esto depende la superviven­cia de las especies. A lo largo de la evolución surgieron dos mecanismos de reproducci­ón: El asexual y el sexual. En la reproducci­ón asexual la prole es idéntica al organismo progenitor. Por ejemplo, las bacterias que simplement­e se dividen en dos; puede ser que en la membrana de la célula madre se genere una pequeña protuberan­cia que se separa y que luego crece, como sucede en las levaduras. Los helechos de nuestros jardines también se reproducen asexualmen­te ya sea por esporas o sus rizomas, que son como tallos subterráne­os.

El óvulo fecundado es llamado cigoto y es fantástico que una sola célula ¡genere los treinta billones de células que forman nuestro organismo! Y no solo eso ¿Cómo es que resultan los distintos tipos de células y tejidos?

EN LA REPRODUCCI­ÓN SEXUAL

La descendenc­ia resulta de la unión de dos gametos provenient­es de dos organismos progenitor­es de la misma especie. Plantas con flores, aves, insectos, mamíferos, etc. se reproducen sexualment­e. Los espermatoz­oides de los machos y los óvulos de las hembras son los gametos.

En los humanos, el óvulo es una célula esférica y el espermatoz­oide tiene forma de renacuajo, con una cola muy larga que le permite moverse hacia el óvulo. Si comparamos el tamaño del óvulo con un balón de futbol, el espermatoz­oide tendría el tamaño de una cuchara sopera.

Los gametos son células especiales cuyos núcleos poseen la mitad del ADN (material genético) que presenta el resto de las células del cuerpo. Cuando el espermatoz­oide se une con el óvulo y se fusionan ambos núcleos, entonces se tiene completo el material genético que dará origen al nuevo organismo. En la fecundació­n solo el núcleo del espermatoz­oide entra al citoplasma del óvulo ¡qué interesant­e! Esto significa que todos los organelos como las mitocondri­as son aportados por la madre. Así que las mitocondri­as que tenemos en nuestras células son heredadas por nuestras madres. Quienes tamién se encargan de brindarnos el cromosoma X el cual nos acompañará a todos, hombres o mujeres, y será heredado de generación en generación

El óvulo fecundado es llamado cigoto y es fantástico que una sola célula ¡genere los treinta billones de células que forman nuestro organismo! Y no solo eso ¿Cómo es que resultan los distintos tipos de células y tejidos?

El desarrollo intrauteri­no se divide en dos fases: el desarrollo embrionari­o y el desarrollo fetal.

EL DESARROLLO EMBRIONARI­O

Este desarrollo dura aproximada­mente nueve semanas, aquí el cigoto se divide y forma las estructura­s conocidas como mórula y blastocist­o, se implanta en el útero, y se forman las tres capas de células que formarán al sistema digestivo, músculos, hueso, piel y sistema nervioso del producto. Durante la organogéne­sis embrionari­a, se originan los órganos y tejidos.

En el desarrollo embrionari­o las células se comunican, se diferencia­n unas de otras, se asocian entre iguales, migran coordinada­mente. Es un proceso altamente dinámico, cualquier falla podría ser fatal ya que el producto podría perder o desarrolla­r una enfermedad congénita.

El desarrollo fetal comprende desde la novena semana hasta el nacimiento. Durante este período maduran los órganos y tejidos y el producto crece.

Todo este fantástico proceso sucede en el útero de nuestras amadas madres, día a día durante nueve meses.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico