Lucy, la madre de todos nosotros
En lo que hoy es el país de Etiopía, una mujer murió y sus restos fueron sepultados por las arenas y los tiempos de tres millones de años. El 24 de noviembre de 1974 y a 160 km de la capital Adís Abeba, el equipo formado por Yves Coppens (Francia), Donald Johanson (EUA) y Maurice Taieb (Francia) realizaron un descubrimiento que cambiaría la comprensión del ser humano y su evolución, pues encontraron los restos de Lucy.
Previamente, en 1961, ya se había encontrado un fósil en Chad, un Tchadanthropus (una especie de homínido), en 1967 encontraron en Etiopía los restos del prehumano más antiguo hasta ese momento, con 2.6 millones de años de antigüedad. Y en una exploración que tomó tres años (1972-1974), encontraron a Lucy, una Australopithecus afarensis, una especie entre los simios y los humanos.
El hallazgo de Lucy es importante porque es el esqueleto "más completo y conservado" que los hallazgos anteriores (52 huesos, alrededor de un 40%) y con base en ello pudieron deducir que se trataba de una mujer de unos 20 años, que ahora consideraríamos joven, pero que para un Australopithecus era muy vieja, con 1.20 metros de estatura y entre 25 y 30 kg de peso, con piernas largas y brazos cortos más parecida a un humano pequeño que a un mono grande y con una antigüedad de 3.2 millones de años.
Actualmente se piensa que está muy relacionada con el origen de la humanidad, porque con base en la anatomía comparativa de la columna vertebral, el fémur y la tibia dedujeron que Lucy podía caminar y correr de forma erguida, con base en los huesos del brazo podía escalar, con base en los huesos del cráneo poseía un cerebro pequeño y sus dientes sugerían que era principalmente vegetariana.
Aunque en la bitácora le pusieron originalmente "AL 288" otro miembro
El hallazgo de Lucy es importante porque es el esqueleto "más completo y conservado" que los hallazgos anteriores y con base en ello pudieron deducir que se trataba de una mujer de unos 20 años con 1.20 metros de estatura y entre 25 y 30 kg de peso, con una antigüedad de 3.2 millones de años, con piernas largas y brazos cortos parecida más a un humano pequeño que a un mono
del equipo investigador comentó que no era muy apropiado llamar a esta hembra ‘AL 288’, y propuso llamarla Lucy, con base en la canción de Lucy in the sky with diamonds, y así es como todos nosotros la hemos conocido.
El hallazgo la ubica como un ancestro de los Homo sapiens y también como una conexión evolutiva con los primates, este descubrimiento se entiende hoy como uno de los más grandes de la historia del proceso evolutivo. Tras este descubrimiento se han encontrado más de 250 fósiles de al menos 17 individuos en la misma región africana, dos de ellos eran niños de unos cinco años, pero el esqueleto más completo fue el de Lucy.
Para entender mejor a Lucy surge la pregunta de ¿Cuáles son las características típicas de los humanos?: 1. Caminar erguidos; 2. el tamaño del cerebro (más grande en los humanos que en los primates); 3. Capacidad de elaborar herramientas; 4. Pertenecer al género Homo, actualmente se considera que el árbol genealógico de la humanidad se compone de entre 15 y 20 especies.
Lucy reúne esos cuatro puntos que caracterizan a los humanos, y al parecer ella podría ser la madre primogénita de todos nosotros.