Empresarios 2024: Colosio
Comentábamos en la entrega pasada que los empresarios, industriales y comerciantes mantienen opiniones divergentes sobre la manera que habrán de enfrentar la sucesión presidencial de aquí a dos años: unos en franco desafío al gobierno, pero sin candidato a la vista; y otros, más cautos, apostando a algún candidato moderado del partido oficial. La incógnita era el Grupo Monterrey.
No bien había acabado de dar el último teclazo a esa columna cuando comenzó a llegar, de distintos ámbitos y niveles de la IP, el nombre de Luis Donaldo Colosio Riojas, un joven y serio político, alcalde de Monterrey.
Alguien susurró: “Fíjate en este detalle: AMLO logró su presencia y posicionamiento tras casi 20 años de campaña, este personaje lo tiene por tres tragedias y para mayor problema para Morena su nombre está en calles, glorietas y monumentos. Sin negativos y con la simpatía de quien pierde a su familia, no hay razón para que el PRI no se sume o el PRD. Lo interesante, en todo caso, será saber qué haría el PAN.”
No tiene negativos, en efecto, porque no tiene trayectoria. Para efectos prácticos tampoco ha hecho nada. No sabemos de algún proyecto de nación propio, alternativo al de la 4T. ¿Podría el solo apellido llevarlo adelante?
La respuesta vino de alguna manera en la encuesta del periódico Reforma publicada el pasado lunes, donde Colosio quedó con el 26 por ciento de preferencias electorales presidenciales, sólo debajo de Marcelo Ebrard (34 por ciento) y de Claudia Sheinbaum (33 por ciento). Sin haber hecho algo notable en su vida pública, el joven tiene un activo político latente de ese tamaño.
¿Cómo pulir ese diamante en bruto? Con poderosos capitales regios atrás, el dinero no sería problema. En lo político, su militancia en Movimiento Ciudadano es una ventaja pues no se identifica en automático con el desprestigio de PRI y PAN. Tendría a un mentor con colmillo, como Dante Delgado, que le sabe de todo a AMLO, y que a su vez es prescindible si él mismo se volviera un negativo para el muchacho.
La lógica es que con su imagen de seriedad, contrastante con la del locuaz Samuel García --quien enfrenta ya el desgaste de ser gobernador de Nuevo León--, Colosio no lo puede hacer peor que alguien de Morena.