La crisis de los petroleros de Pemex
Se acabó la canción de “Petroleros con Romero”, los buenos tratos y ahora las cosas ya se pusieron bien rudas entre la gerencia y el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), ni modo, así vienen las cosas.
Recientemente se han registrado manifestaciones en las plantas de Pemex en distintos estados del país y lo que está haciendo el sindicato petrolero es levantar cuanta evidencia le es posible para poder acusar de violaciones al Contrato Colectivo de Trabajo (CCT) a la empresa productiva del Estado.
La petrolera no se quedó con las manos atadas y emprendió diversas acciones para quitarle al gremio varias canonjías que tenía, por ejemplo, el STPRM contaba con la facultad para la basificación de miles de trabajadores transitorios, y ya no.
El argumento de la gente de recursos humanos es que, según sus cálculos, ese método se presta a corrupción, por lo que considera que la administración de la empresa puede hacerlo mejor que ellos. Las plazas de base están contenidas en las cláusulas 4, 5 y 6 del CCT, es decir, faculta al sindicato a entregarlas a sus agremiados. Sin embargo, desde hace al menos dos años, la administración de Pemex de plano congeló las plazas vacantes y las coberturas temporales que se hacían, con lo cual se violan dichas cláusulas.
Si el gobierno federal, a través de la paraestatal pretende cambiar el método de basificación de trabajadores, lo que está buscando es un choque de trenes enorme que se va a dirimir en juzgados, eso es un hecho porque, ojo, es absolutamente necesario, primero, modificar antes el CCT, pues de lo contrario se está incurriendo en una muy grave violación de los derechos conquistados por el gremio petrolero.
Más grave aún es si toman una decisión que atenta contra los derechos laborales establecidos en el CCT del Sindicato Nacional de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, y sentará un pésimo precedente para que en otras instancias gubernamentales o empresas paraestatales se violenten los derechos de sus trabajadores.
Esto a través de eliminar las cláusulas y disposiciones contenidas en los CCT que les resulten incómodas a la parte gubernamental. Otro problema que deriva de esta violación al CCT de los trabajadores de PEMEX es la falta de personal, que obliga a los trabajadores sindicalizados a desempeñar jornadas dobles o triples e impide que puedan ascender el escalafón que por derecho les corresponde.
Parece contradictorio que un presidente de izquierda, como se supone es Andrés Manuel López Obrador, que se dice aliado de los que menos tienen y que busca el beneficio de la clase trabajadora, avale o guarde silencio en torno a las acciones que se están ejecutando en la administración de Pemex, las cuales limitan el derecho a la libre organización de los trabajadores.
Contrario a lo que está sucediendo, para sacar adelante a una empresa tan importante para el Estado mexicano, es necesario personal capacitado, con experiencia, porque de lo contrario la paraestatal estará condenada a seguir cayendo en picada, sin control. Y conste, no es amenaza, es advertencia.
BUZOS
1.-Nos confirman. El 2 de julio se inaugura el comedor general de la refinería Dos Bocas y, tal vez, una parte de los tanques de almacenamiento.
2.-¿Habrá tiro parejo entre Pemex y ENI por el yacimiento de aguas someras compartido en el yacimiento Miztón que está en manos de los privados? La CNH dice que es probable que el yacimiento esté en ambas asignaciones, nada más que la petrolera mexicana no le mete nada de dinero. Es más, va a pelear que se lo den en tribunales.