MUERE VANGELIS, GENIO ESPACIAL
CREADOR DE LA BANDA SONORA DE PIONERO DE LA ELECTRÓNICA Y DUEÑO DE SU PROPIA ESTRELLA, EL MÚSICO GRIEGO DEJÓ DE EXISTIR A LOS 79 AÑOS
Vangelis no sólo compuso la música de Blade Runner. También hizo lo propio con Carros de fuego —película que le valió un Oscar en 1981— y 1492: la conquista del paraíso (1992). Cintas que transcurrieron en la misma línea de su música: épica, atmosférica y, al mismo tiempo, digerible.
“Su música forma parte de la memoria colectiva de varios filmes. Con Carros de fuego vemos el clímax narrativo que funde sonido e imagen: es la intensidad que logra un equilibrio emotivo entre lo que se ve y lo que se escucha. Esta banda sonora incluso ha sido parodiada en varias ocasiones”, afirma Gerardo Gil Ballesteros, crítico de cine de esta casa editorial.
Esa inusual mezcla entre sofisticación y popularidad le concedió un estatus de rockstar dentro de la música instrumental. Sus giras eran más parecidas a las de un ídolo de masas que a las de un compositor de academia —que nunca lo fue. Entre las décadas de 1980, 1970 y 1990 recorrió el mundo con sus ambiciosos espectáculos, que iban desde escenificaciones de la mitología griega hasta óperas de producciones millonarias.
“El caso de Vangelis es el del artista de vanguardia que se funde con un estilo clásico. Es la vanguardia y, a la par, la tradición”, afirma Gil Ballesteros.
Junto con Giorgio Moroder, Jean-michel Jarre y Kraftwerk, Vangelis habita en el Olimpo de los pioneros de la música electrónica. Sus experimentos con los sintetizadores Moog dieron pie a que mucha gente probara con nuevos sonidos espaciales y psicodélicos. El genio de Vangelis también vive en grupos como Yes, Pink Floyd, King Crimson, Depeche Mode, Massive Attack, o en el mismísimo David Bowie, y un sinfín de artistas que no se conformaron con el éxito pop.
“Todos recordaremos para siempre tu toque único y tus conmovedoras melodías. Desde hace mucho tiempo, siempre compartimos la misma pasión por los sintetizadores y la música electrónica. Descansa en paz”, escribió Jean-michel Jarre en Twitter.
No es raro que Vangelis haya comenzado su carrera con Aphrodite's Child, banda de rock progresivo y psicodélico que, con los años, se ha convertido en un grupo de culto.
“Pudo ser un compositor de progresivo o incluso de balada, como su compañero Demis Roussos, pero escogió un camino sumamente extraño y experimental”, dice Chimal, quien destaca tres grandes álbumes del músico griego: Soil festivities (1984), Mask (1985) y Voices (1995).
“Es fácil menospreciar el trabajo de Vangelis como música de elevador: fondos insulsos para no ser escuchados. Pero sus experimentos con sintetizadores dieron varias obras maestras”.
Ahora que Vangelis ya no está entre el mundo de los hombres, vale la pena izar la mirada al cielo: allí, un asteroide lleva su nombre. Así fue como la Unión Astronómica Internacional decidió honrar su obra, tan inabarcable como el universo.
GERARDO GIL BALLESTEROS CRÍTICO DE CINE
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