Taladores clandestinos, huachicoleo de agua y cazadores ilegales son los problemas que combaten
CDMX. La vigilancia de las zonas boscosas capitalinas está a cargo de un músculo de fuerza y seguridad integrado por la Policía Ambiental Faunos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), en colaboración con la Guardia Nacional, el Ejército y la Procuraduría Federal de Protección Ambiental, aseguró Felipe González Loza, inspector jefe de la Policía Metropolitana identificada como Faunos.
La entrevista tuvo lugar en Los Dínamos, donde es posible apreciar al último río vivo de la zona metropolitana, El Magdalena, y que sus comuneros, con la policía capitalina, cuidan como un tesoro esa parte forestal, la cual hasta ahora no ha sufrido los embates de talamontes.
Antes de las diez de la mañana, elementos de la Policía Montada, que coadyuvan con el grupo Faunos en el resguardo de ese terreno agreste, inician sus recorridos para proporcionar seguridad y dar certidumbre a los paseantes.
Talamontes clandestinos, invasión de predios en áreas protegidas, huachicoleo de agua y cazadores furtivos son las plagas principales que sufren las zonas boscosas de la Ciudad de México, que abarcan principalmente una franja que va desde la alcaldía Cuajimalpa hasta Milpa Alta. En los faunos hay 402 elementos y un helicóptero para sobrevolar las nueve alcaldías del sur y poniente de la capital, donde está la zona de reserva ecológica.
La aeronave con la que cuenta realiza un recorrido semanal para tomar fotos con las cuales verifican si hay o no crecimiento urbano hacia las partes forestales de la ciudad.
El inspector jefe dijo a Organización Editorial Mexicana que los drones son otro elemento sumado a esta vigilancia por los aires, pero aclaró que dichos aparatos son elevados cuidadosamente en las madrugadas, como parte de la investigación previa antes de un operativo contra talamontes, quienes pueden disparar contra ellos y derribarlos.
Explicó que los leñadores ilegales actúan principalmente en las orillas de la zona boscosa capitalina, por ejemplo, San