Con el sello Cochul
ZURDITO RAMÍREZ AFIRMÓ QUE EL CINTURÓN PLUMA DE LA WBA ES EL PRIMERO DE VARIOS
Desde pequeño, el sinaloense Eduardo Ramírez, mejor conocido en el medio boxístico como el Zurdito, forjó su deseo de ser campeón mundial en el establo de los Cochules, en Los Mochis.
A sus 28 años, en plena madurez, logró coronarse el sábado pasado campeón interino de peso pluma de la Asociación Mundial de Boxeo en el Dignity Health Sports Park de Carson, California, al noquear en el tercer asalto a Isaac Avelar, afirmando que lo mejor en su carrera está por venir, respaldado en el trabajo que ha venido haciendo desde su etapa como amateur con los Montiel, y que hoy le da frutos.
“Es una gran emoción, el ser campeón mundial me deja muy contento, con ganas de seguir avanzando. Puedo decir que me siento en mi mejor momento y que lo mejor de mi carrera está por venir”, expresó con júbilo el peleador mochiteco tras regresar a suelo nacional lleno de satisfacción.
A los Montiel les tiene un gran afecto y él mismo lo describió: “Estoy con ellos desde amateur, son una gran familia, un legado para el boxeo, una bonita escuela, ellos me han formado, el título también es de ellos, es una labor de equipo, son mis entrenadores a los que siempre estaré agradecido”.
Justo en su esquina estuvieron Pedro Montiel, Manuel Montiel y Eduardo Montiel, recordando que el ex triple campeón del mundo Fernando Montiel fue un ejemplo para él en el gimnasio.
“El Cochulito fue un gran campeón, compartimos gimnasio, fue un ejemplo para mí. Ahora debemos aspirar a más e ir por más títulos”, apuntó.
Al preguntarle cuáles son los planes de su representante Sampson Lewkowickz en torno a su siguiente reto, de inmediato respondió que en el radar se encuentra el también mexicano Leo Santa Cruz, súper campeón de peso pluma de la WBA.
“Me dijo que buscaremos una pelea con Santa Cruz. Esta división es muy mexicana, me sumo yo como campeón y nos tocaría enfrentarlo en este mismo año”, remarcó.
Por lo pronto, descansará unas semanas con sus familiares y estima que en 20 días ya estará de vuelta en la sala de prácticas para enfocarse en su siguiente compromiso, en el que de concretarse el combate con el
Terremoto, sería un duelo de campeones mundiales mexicanos.
Es una gran emoción, el ser campeón mundial me deja muy contento, con ganas de seguir avanzando. Puedo decir que estoy en un buen momento y lo mejor de mí está por venir”
EDUARDO RAMÍREZ BOXEADOR