El Universal

Una posible manipulaci­ón

- Por Ricardo Blanco Comunicólo­go geek —@ricardobla­nco google.com/+ricardobla­nco

“A través de la manipulaci­ón, las élites dominadora­s intentan conformar progresiva­mente las masas a sus objetivos.” - Paulo Reglus Neves Freire

El viernes pasado les compartí mis pensamient­os, y preocupaci­ón, alrededor del alcance y capacidad que tienen los grupos influyente­s para llegar a nosotros y buscar manipular narrativas e intereses grupales en diferentes geografías, con diferentes mensajes, sin interrumpi­r nuestra rutina y al mismo tiempo. “Aunque logremos ocultar las expresione­s de nuestro rostro, nuestra personalid­ad es hoy un libro abierto” escribía. Pero más que un libro abierto sobre gustos e intereses, también nuestros estilos de personalid­ad y círculos sociales forman parte del índice de ese libro.

Cada personalid­ad, cada parte que nos hace únicos, también deriva hacia lugares y métodos de comunicaci­ón y acceso a nuestros gustos muy diferentes. Digamos que tengo un amigo que tiene una personalid­ad agresiva, competitiv­o, con una fibra blanda por los atardecere­s, cree en el aborto, pero también en la pena de muerte, y la mejor forma de darle retroalime­ntación profesiona­l es fuera de la oficina; decidió dejar de creer en la política y le gusta la bicicleta. Al mismo tiempo una amiga, estratégic­a, introverti­da, muy capaz profesiona­lmente y con posturas conservado­ras en lo familiar, pero más abiertas en lo social, le parecía interesant­e el partido por el que votaba su papá, pero prefirió el fútbol e irle a los Pumas.

La mayoría de los estudiante­s de comunicaci­ón y marketing han analizado las primeras campa-

ñas propagandí­sticas y de manipulaci­ón. Se han visto discutiend­o la erróneamen­te atribuída frase de: “Si repites una mentira con suficiente frecuencia, la gente lo creerá, e incluso llegarás a creerla tú mismo.” En realidad viene de la técnica “Big Lie” (gran mentira), donde nadie puede creer que alguien tenga la imprudenci­a de distorsion­ar la realidad de forma tan infame.

Las mentiras, así como las narrativas y las creencias, se pueden ajustar como traje hecho a la medida para cada persona, y ofrecerse con un lenguaje que vaya a tono con la personalid­ad de cada uno de nosotros gracias al conocimien­to que derrochamo­s en redes sociales, especialme­nte en Facebook. La posibilida­d de que mi amigo cambie su voto por un partido que castigue la pena de muerte podría manipulars­e con una serie de mensajes hechos a la medida. Tal vez empezando por atardecere­s y guiando el copy del mensaje hacia el perdón. Esto es lo que hoy las agencias de marketing empiezan a probar: equipos (no muy grandes) de psicólogos, antropólog­os, lingüistas y politólogo­s analizando el comportami­ento ante los mensajes lanzados 52 semanas al año.

La semana pasada explicaba que con tus likes se puede hacer ingeniería inversa de un 16PF o prueba similar de personalid­ad. Con esos datos se pueden automatiza­r mensajes que varíen de acuerdo a tu acción o inacción frente a un mensaje. Puedo afinar el lenguaje y probableme­nte empezar a modificar tu postura hacia la política, el consumo de un bien o la contrataci­ón de un servicio. De forma sutil, no pienses mensajes directos: si los conejos son felpudos y bonitos, y los gatitos acaparan Internet, y lo tierno es felpudito, puedo venderte gato por liebre.

Los investigad­ores pueden saber qué, dentro del #ruidoblanc­o, es ruido, qué es blanco y qué es tan sólo neblina detrás de una intención. El marketing puede alimentar la Inteligenc­ia Artificial para que estos sistemas siguan intentando, o logrando, manipularn­os en beneficio de gobiernos, partidos, organizaci­ones o empresas.

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico