“Mal calificada”, la constructora del Paso Exprés
En calidad y experiencia, cero, según la licitación Destituyen al delegado de la SCT en Morelos
En el proceso de licitación para la construcción del Paso Exprés de Cuernavaca, donde el miércoles se registró un socavón que les costó la vida a dos personas, el consorcio ganador Construcciones Aldesem y Epccor obtuvo bajas calificaciones en los rubros de calidad y experiencia.
En la parte técnica, una de las más importantes para que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) le diera el contrato y que representaba 50 puntos, el consorcio obtuvo 37.8. De los 4.4 puntos que valían los indicadores del sistema de aseguramiento de calidad y experiencia en obras no logró ninguno. Pese a eso, ganó debido a que su propuesta económica era de las más bajas.
Pero ahí tampoco cumplió. El presupuesto original era de mil 45 millones de pesos y al finalizar la obra el costo se elevó a 2 mil 213 millones.
En la revisión de la cuenta pública 2015 hecha por la Auditoría Superior de la Federación se detectaron irregularidades en la obra por más de 270 millones de pesos.
En tanto, el delegado de la SCT en Morelos, José Luis Alarcón, fue destituido. El presidente Enrique Peña instruyó al titular de esta secretaría, Gerardo Ruiz Esparza, a separar del cargo a los funcionarios implicados en supervisar la obra. El PAN en San Lázaro pidió la destitución de Ruiz y el PRD en el Senado, su comparecencia.
El presupuesto bajo que presentó Aldesem y Epccor tampoco se cumplió. La propuesta original era de mil 45 millones de pesos y al finalizar el costo de la obra se elevó hasta los 2 mil 213 millones de pesos. Además, de acuerdo con la revisión de la cuenta pública 2015 hecha por la Auditoría Superior de la Federación (ASF), se detectaron pagos por más de medio millón de pesos por servicios que no se realizaron o que se inflaron, por ello, no “cumplieron con el alcance y se ejecutaron trabajos de mala calidad”.
El documento también señala que después de una visita en octubre de 2016 a la zona de obras, detectaron carencias en la infraestructura y cambios en los materiales de construcción. “Se observó que el proyecto que está en proceso de ejecución no cuenta con retornos, acotamientos laterales interiores y exteriores, accesos y salidas a la carretera para los vehículos de emergencia, vigilancia o mantenimiento, lo que dificulta su operatividad. Además, la estructura de los pavimentos cambió de base y carpeta de concreto asfáltico por una estabilizada con cemento portland y carpeta de concreto hidráulico”.
Además de los más de 2 mil millones de pesos que costó la obra, la Secretaría de Comunicación y Transportes (SCT) otorgó otros nueve contratos para este proyecto. Uno de ellos por 7 millones 227 mil pesos para Desarrollo Integral y Productividad Empresarial, SC. Su objetivo: verificar la calidad de los trabajos relativos a la ampliación del libramiento de Cuernavaca (Paso Express). Más otros 38 millones 557 mil pesos que se llevó Sacc Ingeniería, SA de CV por la “coordinación del proyecto”. Contrato que solo duró un mes.
En diciembre de 2014, cuando aún no comenzaba la obra, el testigo social Enrique Alcántara le hizo la advertencia a la SCT de que en el contrato no estaba claro cuántos carriles iba a poder ser ampliada la autopista.
“Esta licitación está iniciando sin la certeza de poder llevarla a cabo en el tiempo y costo considerado originalmente”.
Entre los problemas que se detectaron desde el inicio estaban la invasión del derecho de vía y la afectación al medioambiente, en especial a los bosques. “El derecho de vía existente sólo permite la ampliación a cuatro carriles de circulación por sentido, por lo que en un futuro se requerirá la construcción de nuevos carriles en un segundo piso”, aseguró Alcántara en el documento fechado al 5 de diciembre de 2014.
Otro de los rumores detrás de este proyecto fue que la empresa Epccor era propiedad de los hijos del empresario Juan Diego Gutiérrez Cortina, dueño de Gutsa Infraestructura, la cual había sido inhabilitada por la Secretaría de la Función Pública en 2011 por el incumplimiento de dos proyectos, de acuerdo con información de la agencia Reuters. Uno de ellos, una obra en esta misma autopista. Ante esto, la SCT indicó que la adjudicación se hizo conforme a la ley. Se le consultó a la secretaría sobre el detalle del fallo de la licitación y hasta el cierre de la edición no había contestado.