CLÁSICO ITALIANO
Recuerdan con una cena entre amigos los secretos y recetas de Giuseppe Cipriani
Nos preguntamos, ¿Giuseppe Cipriani fue un adelantado a su época o, simplemente un visionario del lujo integral? Más bien, fue una mezcla de las dos posturas, si bien en sus comienzos su economía fue muy precaria, jamás imaginó llegar a desarrollar un emporio restaurantero que hoy cobija varias sucursales en diversos destinos top.
La Ciudad de México no es la excepción y gracias a sus socios comerciales mexicanos, los hermanos Helfon, contar con una sucursal —en plena avenida Presidente Masaryk— del famosísimo Cipriani, es todo un privilegio.
Su diestro gerente operativo, Francesco Avogaro, buen conocedor del refinamiento restaurantero, organizó una cena entre amigos muy especial y con cierto aire de nostalgia para re- cordar aquellos ayeres cuando se fundó en Venecia el Harry’s Bar y cómo evolucionó el grupo a través de sus descendientes, para colocarse como un must por donde han pasado personajes y celebridades del gran mundo.
Un video memorable de imágenes de otros tiempos que son de gran valor testimonial e histórico fue proyectado, mientras comenzaban los brindis con champagne.
El chef Donato Caccavelli se esmeró en recrear los platos más tradicionales y de fama, como el Carpaccio di manzo, las pastas como el Tagliolini bianchi y el Helado de vainilla, que son una maravilla, entre otros platillos.
Buenos vinos acompañaron al menú y una sobremesa muy grata se armó durante la primera Classic Night que están organizando a manera de petit comité en los privados y terraza del restaurante, con anécdotas históricas sobre la familia italiana de tanta tradición.