“Entre descrédito institucional y corrupción, 2018”
• Tribunal electoral está preparado, dice magistrada Otálora
Las elecciones de 2018 se darán en un momento “complejo y difícil”, no sólo por la coyuntura política, sino también “por altos niveles de desconfianza en las instituciones, corrupción, crecientes desigualdades sociales, crisis económica e inseguridad”, afirma Janine Madeline Otálora Malassis, magistrada presidenta de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
Dice que el Tribunal está preparado con “firmeza e independencia para impartir justicia que dé certeza a la democracia”.
El proceso electoral de 2018 pondrá a prueba la solidaridad de los órganos electorales, los partidos, instituciones gubernamentales y la ciudadanía, porque el momento “es complejo y difícil”, no sólo por la coyuntura política, sino porque está “marcado por altos niveles de desconfianza en las instituciones, corrupción, crecientes desigualdades sociales, crisis económica e inseguridad”, dijo Janine Madeline Otálora Malassis, magistrada presidenta de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
Al presentar su primer informe de labores ante el pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), dijo que las elecciones del próximo año serán las “más grandes, complejas, y quizá, las más competidas de nuestra historia, que nos permiten vislumbrar retos importantes para la justicia electoral”.
Insistió en que “la democracia es receptora de la decepción generada por el actuar de las autoridades públicas. Esto merma la confianza y la participación de la ciudadanía en los procesos electorales”.
Por ello es importante distinguir entre el buen gobierno, al que le corresponde garantizar la seguridad, la libertad y la paz, y por otro lo que le corresponde a la democracia.
Al declarar que el Tribunal está preparado para realizar los procesos electorales del próximo año con “firmeza e independencia, para impartir justicia que dé certeza a la democracia”, reconoció que “el país merece instituciones fuertes, legítimas y con credibilidad, así como procesos electorales íntegros”, porque ese es uno de los clamores contundentes e ineludibles en México.
Afirmó que todo proceso electoral exacerba los enconos sociales y políticos, y los debates intensos y ríspidos son propios de toda democracia y de la arena política.
En difusión de los mensajes de propaganda y fiscalización de ingresos y gastos de campaña, Otálora Malassis manifestó que se facultó a la autoridad fiscalizadora para imponer sanciones cuando los sujetos obligados incurran en irregularidades, y se ha definido “de manera objetiva el criterio para distinguir los supuestos actos anticipados de campaña, del ejercicio que realizan los actores políticos en el marco de su libertad de expresión, equilibrando la equidad en las contiendas con el ejercicio de este derecho”.
Al acto acudieron el presidente de la Corte, el ministro Luis María Aguilar Morales; el pleno del Consejo de la Judicatura (CJF), el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong; el presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Jorge Carlos Ramírez Marín, y el presidente del INE, Lorenzo Córdova, además de los presidentes de las principales fuerzas políticas.
Otálora Malassis dijo que para preservar su neutralidad, “las instituciones electorales debemos mantenernos por encima de la disputa por el poder político” y su única guía debe ser la Constitución.
La magistrada consideró que la justicia electoral no busca el aplauso ni huye de la crítica.
“Nuestra justicia electoral es el reflejo de quienes la impartimos. No buscamos el aplauso ni huimos de la crítica, nos sometemos siempre a un escrutinio estricto y exigente de los actores políticos y de la ciudadanía. Reiteramos nuestro compromiso de servir a la democracia”.
Buscan estar a la altura, añadió, de las exigencias y ser garantes de derechos en la imparcialidad que demanda la democracia.
Refrendó que el Tribunal es una institución sólida, imparcial y comprometida con el ideal democrático.
Rumbo al próximo año, Otálora Malassis reconoció que este proceso “representa una oportunidad para probar esa fortaleza institucional e integridad electoral; para hacer eco de las demandas sociales y consolidar las libertades y derechos de los mexicanos”.
“La democracia es receptora de la decepción generada por el actuar de las autoridades públicas. Esto merma la confianza y la participación” JANINE MADELINE OTÁLORA Magistrada presidenta de la Sala Superior del TEPJF