Para ambos
El simple hecho de imaginarse en un quirófano pone a temblar a cualquiera, sobre todo si el procedimiento en cuestión se llevará a cabo en el rostro.
Por fortuna, ya hay diversas alternativas cosméticas que no requieren bisturí y ofrecen resultados positivos. Así pues, te presentamos los métodos más solicitados en el consultorio actualmente. Solo recuerda siempre consultar con tu médico antes de decididir... Bótox: la promesa de este tratamiento estético, que se ha popularizado tanto en mujeres como hombres, es desvanecer las arrugas y hacer lucir el rostro mucho más fresco y relajado.
La toxina botulínica, nombre de esta proteína, es inyectada en pequeñas cantidades en las áreas que deseen tratarse y el dolor causado es mínimo.
Los resultados empiezan a notarse a partir del tercer día y el efecto final se percibe luego de una semana. Pero, de no ser aplicado por profesionales, puede traer serios efectos secundarios a la paciente, como la caída temporal del párpado.
Suele aplicarse en el tercio superior del rostro y brinda resultados naturales, siempre y cuando no se caiga en el exceso. Las mejorías se vuelven evidentes una semana después del procedimiento.
“Cada cuatro o seis meses, el paciente debe regresar al consultorio para una nueva dosis”, recomienda el dermatólogo Rodrigo Gutiérrez Bravo.
Rellenos: uno de los métodos que ha ganado notoriedad en los últimos años, debido a su aplicación rápida y segura es el ácido hialurónico, un producto inyectable de origen no animal creado para reducir de manera efectiva la aparición de arrugas y surcos. Esta molécula, generada naturalmente por el cuerpo, ayuda a realzar, recuperar el volumen, rejuvenecer la piel y da estructura a la cara, sobre todo en el entrecejo; además, beneficia la hidratación y aporta elasticidad a la piel.
Este ácido, presente en el organismo, brinda firmeza a la piel y ayuda a retener el agua en ésta, por lo que también es una opción confiable para hidratar a profundidad y servir como lifting en la cara.