En la actualidad
La mayoría de las personas dedican su día a actividades de trabajo las cuales, muchas veces, les generan tensiones que pueden afectar su desempeño. Pero no solo eso, de acuerdo con la Clínica de Trastornos del Sueño de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el estrés, la depresión y los conflictos laborales son algunos de los problemas que frecuentemente le quitan el sueño a los mexicanos y disminuyen su calidad de vida.
Como consecuencia de esta situación, la salud física y mental de las personas resulta afectada, así como su capacidad para desempeñarse bien en el trabajo. Sin embargo, hoy las empresas apenas se dan cuenta del impacto directo que tiene el descanso en la productividad de sus empleados. Y es que, si estos no duermen las siete u ocho horas recomendadas, su concentración, poder de decisión y reacciones se vuelven deficientes o más lentas.
El sueño deficiente es la principal causa de los errores estratégicos, el descenso en la productividad y el aumento de accidentes laborales. De hecho, se calcula que el costo por esta causa puede alcanzar los 411 mil millones de dólares al año en Estados Unidos; 138 mil millones, en Japón; y 60 mil millones en Alemania.
Una solución
Para que sus colaboradores duerman mejor y esto redunde en un beneficio para todos, las empresas pueden ofrecerles mejores condiciones de trabajo, flexibilidad de horarios y la posibilidad de laborar desde casa, así como otros apoyos. Por ejemplo: un programa que fomente el estado físico a través de membresías a gimnasios junto con sesiones de masaje o yoga podría significar un beneficio real. Incluso la creación de mejores espacios de trabajo sería una contribución positiva para ellos y, a la postre, para la empresa.
Programas de bienestar
Diversos estudios demuestran que el estrés, resultado de los problemas para pagar deudas, afecta a todo tipo de empleados y tiene un impacto negativo en su rendimiento. Existen algunas compañías, como la francesa Sodexo, que ayudan a las empresas a lidiar con estas dificultades a través de su servicio de tarjetas de despensa y herramientas de trabajo que ofrecen la posibilidad de reducir el nivel de preocupación. Con este apoyo, los empleados realizan pagos de alimentos, solventan compras de navidad o cumpleaños y realizan su despensa en miles de establecimientos con los cuales se tiene convenio. Con este tipo de instrumentos, las compañías dan un incentivo a su personal y contribuyen a su productividad; además, mejoran su calidad de vida al aliviar el estrés que enfrentan a diario.
No solo las cifras por las consecuencias del sueño deficiente son alarmantes, sino también la prevalencia de este problema. Por ejemplo, en la India, una de cada cinco personas de entre 18 y 64 años se preocupa más por el cansancio que por la hipertensión o la diabetes; mientras que más de un tercio de los adultos del Reino Unido aceptan que no duermen lo necesario.
Asimismo, más del 50% de 30 mil trabajadores estadounidenses encuestados dijeron que no dormían adecuadamente. Algunas de las causas se relacionan con el trabajo, como el estrés, cansancio físico y mental o por las incomodidades ocasionadas por los desplazamientos.
Lo anterior llega a desencadenar problemas de salud o hábitos nocivos como mala alimentación, tabaquismo, exposición de muchas horas a la televisión y a las pantallas de dispositivos electrónicos como computadoras, celulares y tabletas.