ECODUCTO, CONTRA EL CAMBIO CLIMÁTICO
La obra funcionará como depurador de aguas residuales, a través de un sistema de humedales y biodigestores, que serán extraídas del río de la Piedad y posteriormente utilizadas para riego
Encima del cajón del drenaje de Viaducto Río de la Piedad, el Gobierno de la Ciudad de México construye un proyecto autosustentable, que tendrá múltiples beneficios ambientales para combatir el cambio climático.
El Ecoducto, ubicado en medio de los seis carriles, es un nuevo parque lineal que mide 1.6 km de largo y con más de 4 mil 800 metros cuadrados de vegetación, que funcionará como un depurador, a través de un sistema de humedales y biodigestores de las aguas residuales que serán sustraídas del río de la Piedad.
El espacio abarca de la calle Unión a la avenida Monterrey, para la reapropiación de los ciudadanos. El gobierno capitalino indicó que el proyecto dignifica un área que era utilizada por la gente para hacer picnics o pasear a mascotas.
Señaló que el parque lineal tiene el andador peatonal, de 2.60 metros de ancho, ubicado en la parte central. Mencionó que para la seguridad de los paseantes, se cuenta con el barandal de protección, con una altura de 1.50 metros.
En sus 1.6 kilómetros de longitud, declaró, está equipado con 110 bancas, 186 luminarias, 31 reflectores RGB para iluminación artística y hasta 48 conexiones USB para la recarga de aparatos eléctricos. Detalló que los asistentes pueden ingresar a través de cuatro entradas ubicadas en los cruceros de Viaducto con las avenidas Insurgentes, Patricio Sanz, Medellín y Monterrey. La administración capitalina indicó que esta intervención es la primera que realiza un gobierno después de 75 años que fue entubado el río y se hizo en coordinación con la Asociación Civil Cuatro al Cubo y académicos.
Agregó que la flora del lugar favorece la producción de oxígeno, contribuye a la reducción de 50 toneladas de dióxido de carbono emitidas a la atmósfera cada año, así como a la disminución de 10 decibeles en el interior del parque. Precisó que la inversión de 90 millones de pesos para la intervención de 8 mil 760 metros cuadrados beneficiará a casi 300 mil personas. El biólogo Alejandro Alva Martínez, del Departamento de Hidrobiología de la Universidad Autónoma de Metropolitana (UAM), quien participa en el proyecto, señaló que actualmente las plantas están en un periodo de preaclimatación para seleccionar a las especies resistentes, porque ninguna había sido probada.
Aseguró que en el lugar existen 50 mil ejemplares de plantas, de 50 especies diferentes (acuáticas, crasuláceas y ornamentales), que forman parte de los humedales y servirán para limpiar el agua del río de la Piedad.
A través de este proyecto se removerán los principales contaminantes del agua entubada: materia carbonosa, microorganismos patógenos, nutrientes, sólidos suspendidos y metales pesados, para convertir 30 mil litros diarios de aguas negras en agua tratada.