Ozuna entrega velada “Única”
El cantante ofreció un show lleno de flow, trap, perreo, temas nuevos y otros éxitos
Tras ganar el premio Artista Revelación en la más reciente entrega del Billboard Latino, el cantante Ozuna llegó de nueva cuenta a la Arena Ciudad de México para refrendar su popularidad con los capitalinos.
En pocos meses, Juan Carlos Ozuna Rosado, nombre real del cantante, se ha convertido en el favorito de los amantes del trap y el reggaetón, lo cual se apreció previo al show, cuando en los alrededores de la Arena, decenas de jóvenes que caminaban hacia su encuentro con el músico, coreaban algunas de sus más populares melodías con el fin de pasar una velada llena de baile y sonidos caribeños.
A cinco meses de haberse presentado en el mismo recinto, Ozuna lo volvió a hacer al reunir de nueva cuenta a más de 12 mil asistentes, quienes pudieron disfrutar de lo nuevo del músico, como su recién lanzado tema “Única”, el cual fue coreado por el público pese a que es reciente.
Durante el show, que comenzó en punto de las 20:30 horas, el puertorroqueño interpretó alguno de sus más conocidos temas como “Tú no vive así”, “Dile”, “Privado”, “Flow cabrón” y “Por encima”.
Atento a los piropos y porras de sus fans, Ozuna no dejó pasar la oportunidad de agradecer el recibimiento que, dijo, siempre ha tenido en este país.
“¡Hola de nuevo México! Gracias, muchas gracias por apoyarme y estar aquí, ustedes son parte importante de todo esto”.
La noche fue una masiva fiesta de reggaetón en la que el perreo no pudo faltar y en la que lo mismo se divertían adolescentes que personas mayores de 30, todas reunidas para bailar al ritmo de “Ya me acostumbré”, “Aparentemente”, “Bonita”, “Esencial”, “Pa’ que la pases bien”, “Enamorado de ti” y “Por amar a ciegas”.
Luego de casi dos horas de entregar su flow con temas como “Llegamos a la disco”, “Me prefieres a mí”, “Mucho tiempo esperando” y “Como tiene que ser”, el boricua cerró su presentación en la Ciudad de México despidiéndose de sus fans con su mejores pasos y lanzando besos a los eufóricos que lo despedían con aplausos desde la pista y las gradas.