El Universal

Las Caras online de Frida

- Por Ricardo Blanco Comunicólo­go geek —@ricardobla­nco

Hay piezas artísticas que nos invitan a viajar, a verlas y con nuestra imaginació­n navegar por los trazos y texturas que nos han dado sus autores. Pero el acceso a estas piezas no siempre es sencillo, hay que esperar una exhibición como la belleza que hizo el INBA con El dormitorio de Arlés, de Van Gogh, o viajar a los países que tienen en los museos esas piezas. En México somos afortunado­s, tenemos murales y obras plásticas impresiona­ntes que mucha gente del mundo sueña con poder ver.

Lo que la tecnología nos permite hoy es poder hacer cosas que de niños no podíamos. Un claro ejemplo puede ser el acercarnos a una obra de arte sin que el guardia del museo nos regañe. Otra es poder caminar y conocer la Casa Azul de Frida Kahlo a través de unos “goggles” de realidad aumentada hechos de cartón. Hoy podemos ver con precisión un trazo sin que nos demos cuenta de que llevamos cinco minutos en los detalles del ojo de un autorretra­to.

Con tecnología fotográfic­a diseñada por Google, el Instituto de Cultura y Arte de la compañía se acerca a institucio­nes y coleccione­s privadas para capturar y poder ofrecer, con algunos candados, el contenido a toda la población. Una vez capturadas las imágenes y los tours virtuales por museos o casas, todo se sube a una plataforma que se conforma de sitios web y aplicacion­es para Android y iOS. Así, el brazo cultural del Gigante de Internet agrega la opción de acceder a contenido cultural y artístico a través de sus plataforma­s.

Ahora con #CarasdeFri­da, Google, junto a 33 aliados en siete países, ofrecerán a la gente con una conexión a Internet y un dispositiv­o móvil disfrutar de todo el contenido de Frida Kahlo, incluyendo una colección virtual compuesta por más de 800 piezas: 700 archivos de fotos, cartas y retratos; cinco recorridos virtuales con Street View y realidad virtual; entre otras experienci­as. Poder acceder a este contenido es tan fácil como entrar a g.co/carasdefri­da y empezar a disfrutar las múltiples momentos digitales.

Algo que demuestra la dualidad en el acceso a la reproducci­ón digital de piezas son las palabras del director del Museo Dolores Olmedo cuando se refirió a darle acceso a “los señores de Google” a las piezas. Falta mucho por seguir explicando la digitaliza­ción para crecer la informació­n de calidad en Internet. Es importante que los directores de institucio­nes artísticas interioric­en que dar su permiso de ver a estas piezas por estas plataforma­s no es para las grandes compañías (o tal vez haya sido por la gratuidad o donación por acceder a las piezas) pero al dárselo le otorgan el mismo a toda la gente, no a los señores (y señoras) de Google.

Claramente este acceso va a promover la cultura, no va a disminuir las visitas a ver en físico las piezas artísticas, no va a generar #ruidoblanc­o respecto al arte. Fomentar la cultura a través de lo digital va a ayudar de varias maneras incluyendo la creación de nuevas experienci­as. Por ejemplo, Apple quiere dar a artistas opciones de realidad aumentada y virtual, todavía falta entender su producto a detalle, pero es muy emocionant­e.

El interés de las firmas de tecnología por permitir hacer más a sus usuarios alrededor del arte y la creativida­d es clara, se requiere seguir generando más contenido, se requiere seguir generando opciones de negocio.

“Pinto autorretra­tos porque muy a menudo estoy sola, porque soy la persona a quien conozco mejor.” —Frida Kahlo

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