Arte poblano
La gastronomía poblana se complementa con las espléndidas vajillas de talavera
La cocina poblana no solo es reconocida por su sabor e historia, sin duda, parte de su encanto se debe a las espectaculares lozas en las que se sirven platillos esplendorosos como el mole o los chiles en nogada y, para vajillas, la de talavera es sin duda una de las más bellas y emblemáticas que se pueden encontrar en este estado y el mundo mismo.
La talavera es una cerámica vidriada o estannífera debido a que la base del esmalte está hecha con estaño o plomo. Su origen no es mexicano pero durante el siglo XVI llegaron artesanos de talavera de la Reina provenientes de España que una vez instalados en ciudades como Puebla, continuaron trabajando hasta hacer de su oficio un arte. Finalmente en 1995 la llamada Talavera poblana adquirió Denominación de Origen.
“El taller de la familia Uriarte es el único que continúa activo en el Centro Histórico desde que iniciara actividades en 1824” menciona Mariana Muñoz, directora de relaciones públicas de Talavera Uriarte, una de las contadas empresas certificadas por el Consejo Regulador de Talavera, figura que protege la elaboración de esta artesanía. “La elaboración de talavera se realiza en seis pasos. Utilizamos barro negro y blanco provenientes de Amozoc y Valsequillo. Se mezclan, se le da forma a la pieza con tornos o moldes y deja secar de manera natural”, continúa.
Para que sea considerada talavera, solo se pueden utilizar ciertos colores como el azul cobalto, fino, negro, naranja y verde. “Se llevan a cabo distintas cocciones. Una vez la pieza está seca, se cuece a 850 grados centígrados y se obtiene un barro naranja llamado jahuete, después se su- La talavera poblana
merge en una solución de estaño o plomo; a esto se le llama vidriado. Continuamos con el estarcido que es marcar los dibujos que llevarán las piezas y sirven de guía para los artesanos.
Finalmente llega al área de pintura. Una vez listo se hornea por segunda ocasión a 1150 grados centígrados y obtenemos la pieza finalizada, brillante y colorida pues al tratarse de pinturas minerales se funde con el esmalte.” concluye.