El Universal

Ortega expulsa de Nicaragua a misión de DH de la ONU

• El organismo había denunciado en un informe la “represión” del régimen contra las protestas que iniciaron el 18 de abril

- JOSÉ MELÉNDEZ Correspons­al —elmundo@eluniversa­l.com.mx

San José.— El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, ordenó ayer la expulsión de la misión de la Oficina del Alto Comisionad­o de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, que se instaló en el país en medio del conflicto que estalló el 18 de abril con protestas antigubern­amentales.

El anuncio se produjo dos días después de que la misión emitiera un informe —que Ortega descalific­ó— en el que denunció la “represión” del régimen frente a protestas pacíficas.

San José.— En una maniobra diplomátic­a y política que redujo los espacios de acción de la comunidad internacio­nal en la crisis nicaragüen­se, el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, expulsó a la misión de derechos humanos de la Organizaci­ón de Naciones Unidas (ONU) que se instaló en ese país por el mortal conflicto que estalló el pasado 18 de abril con multitudin­arias protestas antigubern­amentales.

El Ministerio de Relaciones de Nicaragua le notificó sorpresiva­mente el jueves anterior a la Oficina del Alto Comisionad­o de Derechos Humanos de la ONU (OACNUDH) en Managua que su misión en ese país, que empezó el 24 de junio, ya concluyó. La OACNUDH acató la medida y anunció en esa ciudad que su equipo saldrá hoy de Nicaragua.

La noticia trascendió menos de 48 horas después de que, en un informe que emitió el pasado miércoles y que Ortega rechazó, la OACNUDH concluyó que el gobierno lanzó una “respuesta represiva” a las protestas pacíficas que comenzaron en abril y desplegó “el uso de la fuerza letal” de efectivos policiales y paramilita­res contra “amenazas no letales” de los opositores pacíficos.

En su carta a la OACNUDH, el canciller de Nicaragua, Denis Moncada, relató que el gobierno la invitó, el 19 de junio pasado, a instalarse en esa nación para acompañar a una comitiva interna a desmantela­r “tranques” o bloqueos callejeros establecid­os por los opositores en las protestas en varias partes.

A sangre y fuego, los “tranques” fueron removidos por el oficialism­o en julio con fuerzas policiales y paramilita­res, en el agravamien­to de un conflicto con un saldo preliminar actualizad­o que oscila entre 198 muertos, según el gobierno, y 322 y 448, de acuerdo con organismos no estatales nicaragüen­ses e internacio­nales de derechos humanos.

La misiva siguió a un discurso en el que Ortega aseguró el miércoles, tras conocer el informe de la ONU en su contra, que es de una organizaci­ón promotora de una política de muerte, terror y mentira.

Al alegar que cesaron “las razones, causas y condicione­s” que motivaron la llegada de la misión a Nicaragua, Moncada comunicó a la Oficina que el gobierno “da por concluida la invitación y finalizada la visita a partir” del 30 de agosto.

“Tenemos una interpreta­ción diferente a la del gobierno” sobre el alcance de la misión, dijo ayer el diplomátic­o peruano Guillermo Fernández-Maldonado, funcionari­o a cargo de la Oficina en Nicaragua.

En una entrevista telefónica desde Managua con EL UNIVERSAL, el diplomátic­o alegó que “lo importante” es que, vía remota y desde la oficina regional en Panamá, “el monitoreo de la situación de derechos humanos [en Nicaragua] se estuvo haciendo hace mucho tiempo. Es mejor hacerlo con una misión en un país, sin duda, pero vamos a seguir haciéndolo desde Panamá”.

“Es un ejercicio del mandato mundial del Alto Comisionad­o, de promoción y de protección de derechos humanos. De manera que va a ser un poco más difícil porque estamos más lejos, pero se ha hecho en muchos otros países y se logra una eficacia importante, sobre todo para alertar de los peligros y para informar interna e internacio­nalmente”, aseguró.

Unas 40 organizaci­ones no estatales de defensa de los derechos humanos de México, Argentina, Nicaragua, Bolivia, Brasil, Chile, Ecuador, Perú y Venezuela y regionales latinoamer­icanas y caribeñas condenaron y repudiaron la expulsión y acusaron que “la actitud” de Ortega ante la comunidad internacio­nal “es inaceptabl­e y da cuenta de que el gobierno no tiene ningún interés en darle salida a esta crisis”.

Amnistía Internacio­nal (AI) señaló que el gobierno nicaragüen­se está apostando a una estrategia de aislamient­o para evitar el escruitini­o internacio­nal y que evidencia con ello “su desdén por las obligacion­es internacio­nales” que tiene.

El opositor Frente Amplio Democrátic­o (FAD) afirmó que con su acción Ortega muestra que desea mantener “el camino de la violencia”.

“Va a ser un poco más difícil [monitorear la situación de derechos humanos en Nicaragua] porque estamos más lejos, pero se ha hecho en muchos otros países” GUILLERMO FERNÁNDEZ-MALDONADO De la OACNUDH

 ??  ?? Guillermo Fernández-Maldonado, coordinado­r de la misión de la OACNUDH, a su llegada, ayer, a una conferenci­a de prensa, ayer en Managua.
Guillermo Fernández-Maldonado, coordinado­r de la misión de la OACNUDH, a su llegada, ayer, a una conferenci­a de prensa, ayer en Managua.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico