Herles Velasco
Los clásicos en “Insta Novels”
Mucho hemos hablado ya del importante proceso que han sufrido la literatura y los libros desde la llegada del eBook a través del dispositivo Kindle, y del fortalecimiento de las bibliotecas digitales que dieron oportunidad a muchos autores y editores independientes para compartirnos sus propuestas. Pero a pesar de darle al usuario todas las facilidades para acercarse a los libros, hoy en día el problema sigue siendo la falta de lectores; tan sólo en nuestro país, la Encuesta Nacional de Lectura (ENL) de este año reveló que sólo 45 de cada 100 habitantes a partir de los 18 años han leído por los menos un libro en lo que va del año, y es muy complicado pensar que dentro de la lista de obras consultadas se encuentre alguna que forme parte de la literatura clásica.
El escritor Mauricio Montiel Figueiras asegura que en México la gente sí lee, y que son las redes sociales como Twitter y
Facebook las que han contribuido a acercar a los jóvenes a la literatura, pero el problema radica en la calidad de los contenidos. Otro punto importante es que la gente prefiere los recursos multimedia e interactivos dentro de las redes.
Así que, jugando con un arma de doble filo, el equipo de socialmedia de la Librería Pública de Nueva York ha tenido la idea de utilizar la herramienta de historias en Instagram como un medio para publicar piezas clásicas de la literatura, y en alianza con la agencia de publicidad Mother in New York ya comenzó a compartir con sus seguidores las primeras “Insta Novels”.
El proceso es sencillo, solo hay que seguir en Instagram a la Librería Pública de Nueva York a través de su cuenta
@NYPL para poder comenzar a disfrutar de clásicos como
Alicia en el País de las Maravillas, de Lewis Carroll (ilustrada por el artista español Magoz); el cuento corto El papel pintado amarillo, de Charlotte Perkins Gilman (ilustrado por buck_design) o La Metamorfosis, de Franz Kafka (ilustrado por César Pelizar). La mayoría de las publicaciones en las Insta Novels son textos diseñados con tipografías legibles en formato grande, pero también hay algunas páginas animadas para producir un estímulo o interés mayor, así como carátulas para cada capítulo ilustradas con imágenes.
“Queremos que la gente entienda que las bibliotecas no son sólo esos lugares rústicos llenos de libros polvorientos”, explicó el director de la Librería Pública de Nueva York, Christopher Platt; y para hacer el proceso más sencillo, los creativos han desarrollado una historia dinámica que sirve como tutorial, y que explica la interacción con las obras publicadas que además se podrán salvar de ser efímeras, pues por fortuna hace poco la aplicación de historias de Instagram implementó la opción de guardar los mejores contenidos en carpetas dentro de la misma interfaz, evitando que sólo estén vigentes en el perfil por 24 horas, como todas las demás.
Sin duda es una manera muy creativa de acercar a los nuevos usuarios de las redes sociales a la lectura y en especial de las obras clásicas; considerando que se trata de un público cada vez más joven y acostumbrado a interactuar con los formatos digitales en redes, que en últimas fechas ha trabajado para adaptarse a las necesidades de sus usuarios. Es también una buena alternativa para todos aquellos que quieran ser leídos, por lo que la biblioteca neoyorquina estaría también abriendo puertas a nuevos autores.