Monumento a la Revolución.
Uno de los palacios legislativos más lujosos del mundo comenzó a construirse para conmemorar el centeraio de la Independencia, en 1910. La obra planeada por el frances Émile Bénard nunca fue terminada.
Ya no como un palacio sino convertido en un espacio abierto al público, el Monumento a la Revolución hoy está integrado por un museo, cafetería y hasta un mirador.
Su imponente estructura da la bienvenida en este mes con un colorido verde, blanco y rojo. Si quieres observar la ciudad desde el mirador y dar un paseo por los cimientos el costo es de 90 pesos.