La primera exploración
Hasta 1960, era un coloso impenetrable, con rocas, rápidos y cascadas de hasta 30 metros de altura. En ese mismo año, un grupo de chiapanecos llamados Pañuelo Rojo se internó en el cañón por ocho días para convertirse en los primeros expedicionarios en atravesarlo desde la ribera del río Cacahuaré, en Chiapa de Corzo, hasta la playa grande del Usumacinta.