¿Y qué hay con el aceite de coco?
Contiene ácidos grasos de cadena media los cuales se digieren, absorben y metabolizan de modo distinto a las demás grasas. Por su estructura química, el cuerpo tiende a utilizarlos rápidamente como energía en lugar de almacenarlos. Sin embargo, no deja de ser un aceite rico en grasas saturadas (más del 90%). El exceso de grasas saturadas promueve la aparición de enfermedades cardiovasculares. La evidencia sobre los -su puestos beneficios a la salud es limitada, de tal manera que la Asociación Americana del Corazón no recomienda su uso.
Un dato: una cucharada de aceite de coco aporta aproximadamente 11 gramos de ácidos grasos saturados, casi el total de la ingesta diaria recomendada de este tipo de grasa.