De crítica en crítica
Cuando se hizo oficial que el Partido Encuentro Social, asociado a la ultraderecha mexicana, presidiría la Comisión de Cultura y Cinematografía, todos los legisladores morenistas se cuadraron. Entonces comenzaron las benditas redes a incendiarse por esa decisión y la comunidad cultural se hizo escuchar alto y claro. Nos dicen que, de entrada, no había intención de cuestionar esa decisión. Por ejemplo, la senadora morenista Susana Harp, quien presidirá la Comisión en la Cámara Alta, declaró que esa alianza con el PES “fue acordada y abierta” y que siempre fue público que no se limitaría a la elección sino que continuaría a lo largo de la Cuarta Transformación, casi casi se preguntó que cuál era la sorpresa. El diputado Sergio Mayer también salió a decir a los manifestantes que se presentaron en la Cámara de Diputados que su partido era mayoría y que se continuaría apoyando al sector. Horas después, todo cambió, se le quitó al PES no sólo Cultura, también Salud, ante la presión social. ¿Quién se puso de lado de la comunidad? Al parecer, nadie. Y aun así la comunidad ganó. ¿Era necesario llegar a este punto?, ¿cuál será el siguiente round? Por cierto, la noticia de Mayer como presidente de la Comisión tampoco fue recibida con grandes aplausos; por horas se mantuvo como lo más comentado en Twitter y hubo fuertes críticas. La gente cercana al legislador anda diciendo que estén atentos a su trabajo porque “callará muchas bocas”. Atentos quedamos.